Un pequeñita que tiene 6 años y es no vidente de nacimiento, ya sabe manejar bicicleta, le encanta el cine, ya casi sabe leer y escribir en braille.
Ella se llama Amanda Rodríguez Araya, es vecinita de Patalito de Aguas Zarcas de San Carlos y lejos de lo que muchos podrían pensar para una niña que nace sin ver, ella superactiva, chirota, curiosa y alegre por aprender algo nuevo a cada segundo.
Nosotros nos quedamos sin palabras cuando Amandita nos dio la explicación más amorosa, positiva y llena de resiliencia que jamás pudimos imaginar: “Yo veo con el corazón y con las manos”, nos dijo.
Amandita siempre ha tenido un superequipo de apoyo que la estimula en todo momento: Shirley Araya, la mamá; Andrés Rodríguez, el papá; Valentina y Sebastián, los hermanos y otro gran grupo de familiares que no dejan de estar a su lado para colaborarle y no para hacerle las cosas.
“Siento que la estimulación familiar ha sido fundamental, porque con el amor que desde el principio le ha dado la familia, ella respondió superbién. Es demasiado inteligente, todo lo pregunta porque todo lo quiere saber.
LEA MÁS: Mamá hace faroles por las noches, acostada y con una maquinita dándole oxígeno
“En la casa la gran enseñanza de todos los días es un fuerte ‘sí se puede’, porque no hay nada que ella no pueda hacer, por eso logramos que sea tan independiente”, explica la mamá, quien se ha preocupado por publicar videos en redes sociales para demostrar que una niña no vidente puede hacer muchísimas cosas.
Sin barreras
Actualmente Amandita está en primero de la escuela y no crean que está en clases especiales o en un aula especial, no, está en un aula cualquiera con compañeros que sí ven.
“Me encanta ir a la escuela, la disfruto mucho. Para mí es terrible cuando no hay clases porque no comparto con mis compañeros y no aprendo algo nuevo. Ahorita mismo estoy en el proceso de leer y escribir en braille, avanzo muy bien con las letras, ya casi lo logro.
“Solo una vez a la semana recibo enseñanza especial, el resto de los días comparto con mis compañeros que me colaboran en todo. No es que me hagan las cosas, no, solo me colaboran. La maestra (Shirley Villegas) me pone a repartir fichas y mis compañeros nada más me van hablando para irme guiando, pero no me llevan de la mano, lo hago yo solita”, nos comenta Amandita.
Amandita confía tanto en sus manos, que una vez dejó con la boca abierta a una compañerita por la demostración que le dio.
Una chiquita tenía un juguete, Amandita dijo que era un perro, la otra niña, que sí ve, decía que era una llave, pero ambas tenían la razón porque era un juguete de un perro en forma de llave. “Se lo dije que era un perro, porque yo puedo ver con las manos”, se defendió Amandita ante su amiguita.
Enormes sueños
“Me encantan los animales, por eso quiero ser doctora en veterinaria. También me encantan las flores, por eso me gustaría tener una finca bien grande, para llenarla de animalitos y flores por todos lados.
LEA MÁS: Bebé tico no tiene ni 2 añitos y se sabe las banderas de más de 60 países
“Aprendí a amar a los animales porque amo a mis dos perritos, Teo (1 año) y Caramelo (3 años, ambos mezca de pincher con chihuahua). Me gusta mucho escuchar cuentos para después contarlos yo, me sé muchos cuentos y me encanta cantar”, comenta la activa sancarleñita, a la cual usted puede seguir por Tik Tok como “Shir y Amanda”.
Lo del canto para Amanda va en serio, de hecho, le dicen que tiene muy buena voz y el año pasado, en el Festival de las Artes de la zona, ganó en su escuela, pasó a la circuital. Este año espera avanzar más.
“Es que mi hermano Sebastián también canta, entonces, yo siempre lo escuché y soñaba con concursar cantando como él. Voy a mejorar, esta semana comienzo clases de canto y voy a aprender a tocar piano”, dice la pequeñita.
Gran aprendizaje
Doña Shirley, la mamá, nos dice con total seguridad: “Antes creía que nosotros le estábamos enseñando a ella, pero ya entendí que es todo lo contrario, ella nos enseña muchas cosas nuevas todos los días a los que sí vemos. Ahora vemos la vida desde otro punto de vista”.
Hace dos semanas comenzó clases de catecismo y eso le encanta, porque dice que quiere aprender más cosas de Dios.
La hermana, Valentina, se sienta con ella, le narra las películas y ella las vive intensamente, tanto así que ha disfrutado muchísimas, su preferida es Cenicienta.
LEA MÁS: Grupo de motociclistas “de peluche” viaja por el país repartiendo alegría y solidaridad
Ama la música de Kany García, Natalia Jiménez y Yuridia, es aficionada de la Liga Deportiva Alajuelense y muy buena en las mejengas de fútbol.
“Usted sabe que nos pasa muy seguido que se nos olvida que ella no ve, es tan independiente que se nos olvida porque se hace todo sola, igual se prepara un pan con mortadela como siembra girasoles”.