La pequeña Nicole de cuatro añitos, quien murió tras recibir un disparo cuando dos de sus hermanos manipulaban un arma, tenía la ilusión de estrenar todas las cositas que le regalaron para su cumpleaños.
La niña era la menor de seis hermanos y el domingo 4 de setiembre le celebraron su cumple en su casa en en barrio Purires, en San Pablo en Turrubares.
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“No le puedo explicar lo que sentimos en esta comunidad por lo que pasó con la bebé, porque eso era para todos aquí, ella era una muñeca. Sus papás siempre la andaban preciosa y ella era dulce con todos, como madre me pongo en los pies de esos padres, porque aunque la gente hable, no es fácil todo lo que están viviendo”, dijo la vecina de apellido Mora.
Ella aseguró que a la niña, a quien de cariño le decían “Nico”, le festejaron su cumpleaños y le dieron varios regalitos y estaba muy contenta.
“Comentaba la mamá que le había prometido llevarla a Puriscal para que estrenara la ropita. A mí se me eriza la piel con solo ver a la mamá y al papá y todo lo que están pasando, a mi esto me parece mentira, es como que uno espera verla a lo lejos donde va con la familia”, dijo.
En la comunidad estaban recogiendo ayudas para poder darle santa sepultura a la niña, sin embargo, en las redes sociales los allegados informaron que ya lograron reunir el dinerito y que una funeraria en Orotina les va a ayudar también.
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Ellos esperan que el cuerpito se los entreguen hoy y lo velarán en Grifo Bajo de Puriscal, en la vivienda de una familiar. Todavía no han definido la hora del funeral que será este jueves 8 de setiembre.
“Esto es muy duro para un padre o una madre, esto es un hueco que nunca se va a rellenar, nunca en la vida”, dijo Álvaro Gómez, papá de la menor a noticias Telediario.
La Teja consultó a la Fiscalía sobre la situación jurídica de los hermanos de apellidos Sandí y Castro, de 28 y 19, sin embargo, indicaron que darán respuesta en el transcurso del día.
La niña murió la mañana del martes 6 de setiembre cuando estaba en su casa y sus hermanos aparentemente discutían y manipulaban un arma, la cual se detonó y una bala impactó a la pequeña en la parte trasera de la cabeza.
Los dos hermanos mayores la subieron en una moto para buscar atención médica, avanzaron 15 kilómetros y al verla malita se detuvieron en una casa en Barbacoas de Piedades de Puriscal, ahí la metieron en el corredor de una casa, y una enfermera y varios vecinos les ayudaron.
Una ambulancia de la Cruz Roja llegó a ese sitio pero ya la niña estaba fallecida.
Los oficiales decomisaron la moto en que viajaban y también el revólver calibre 38, ninguno de los dos estaba en regla.