Alexa Esquivel Quesada es una pequeña emprendedora como pocas en el país.
Y es que si bien tan solo tiene 13 añitos, esta vecina de San Pablo de Turrubares, ha vivido cosas que un adulto tan siquiera se imagina.
Resulta que Alexa nació con una condición llamada espina bífida, que ocurre cuando la médula espinal y las vértebras no se desarrollan de manera adecuada durante el embarazo, ocasionando problemas neurológicos.
Esta condición ha obligado a Alexa a pasar gran parte de su día a día en una silla de ruedas, pero, encontró la esperanza en una de las cosas menos esperadas: el tejido.
Bellezas
“Yo empecé haciendo manualidades con papel y así, desde los siete o los ocho años. Hacía flores y ramos y se los regalaba a mis amigas”, nos contó Alexa en entrevista.
“Pero, cuando apareció esto de las rosas eternas, me interesó mucho. Empecé a ver todo lo del mundo de tejer y me encantó”.
A pesar de que para muchos podría parecer extraño ver a una niña de 13 años tejiendo, algo que está claro, es que, para hoy en día, esa percepción de que tejer es algo que solo los abuelitos hacen, ha ido desapareciendo.
Lo curioso, es que resulta que en el caso de Alexa se trata, efectivamente, de una tradición que le heredó una persona adulta mayor, pero, no cualquiera, se trata de una abuelita que se parece a ella en más de un sentido.
“Me enseñó una amiga de mi abuela, doña Leticia”, contó con cariño.
“Fui varias veces a la casa de ella, porque es una persona con discapacidad, muy parecida a la mía. Entonces fue ella la que me enseñó poco a poco, pero sí fue difícil al inicio”.
Lastimosamente, una serie de situaciones las fueron separando, especialmente la entrada a clases y cada vez se les hizo más difícil hacer sus tardes de tejido.
No obstante, Alexa atesoró cerca de su corazón todas las enseñanzas de doña Leticia y siguió su camino sola, aprendiendo de la mano de videos y, según cuenta, no le ha ido para nada mal.
“Ya soy un poco más rápida y me encanta hacer rosas, así tejidas”.
Según nos contó, hacer una rosita, algo chiquitito, ahora le puede tomar una hora, como mucho dos. Ahora, si estamos hablando de algo un poco más grande, como escarpines, por ejemplo, sí le puede tomar un poco más.
Pero, esta pequeña es tan carga que todo lo deja listo el mismo día.
Sin límites
Como explicamos en un inicio, si bien Alexa nació con espina bífida y no puede caminar bien, nunca ha permitido que esto la detenga de ser feliz y hacer lo que ella quiera.
“Vieras que ella es muy independiente”, nos contó su mamita, Glenda.
“Dentro de la casa camina con aparatos, tiene su andadera y muletas canadienses, entonces se baja solita de la cama, se baña y hace muchas cosas”.
Y para Alexa, el mundo del tejido, es un constante recordatorio de que tiene la fuerza necesaria para hacer todo lo que se disponga a hacer.
“Me ha ayudado bastante y me ha ayudado a que me sienta más importante”, reconoció.
Duro golpe
Ahora, si bien desde hace un tiempo hizo las paces con su condición y tiene claras sus capacidades, eso no quiere decir que su espina bífida no siga afectando su vida y, hace poco, recibió un duro golpe.
“Vengo saliendo de nueve días en el hospital de Niños”, contó Alexa.
“En el caso de ella, ahora le desanclaron la médula espinal porque le estaba dando problemas como dolor de rodillas y de cabeza”, explicó su mamá.
“Le estaba afectando también los riñones, le daban muchas infecciones, entonces tuvieron que desanclársela”.
Y si pasar por este sufrimiento no fuera suficiente para una niña, resulta que todo este tiempo se tuvo que mantener lejos de las agujas y la lana.
“No podía (tejer) porque tenía que estar boca abajo y me hizo mucha falta”, dijo con dolor.
Pero, ya se encuentra en casita, tejiendo y su mamá no puede estar más feliz de todo lo que ha logrado su hija.
“Tiene más de 34 cirugías en su cuerpo, entonces ustedes no tienen idea lo orgullosa que me siento de cada paso y cada logro que ella da.
“Al verla a ella y todos los logros que ha tenido, no solamente, digamos, en sus manualidades, sino también académicamente, se me infla el corazón”, concluyó.
Si usted desea hacerle un pedido a Alexa, puede hacerlo a través del número de teléfono 8558-9048 o a través del perfil del Instagram “creacionsalexa”.