El médico pediatra Santiago Batalla Garrido decidió dejar las comodidades que le ofrecía San José para jalar a vivir a Talamanca, un lugar en la que hace diez años no llegaba un doctor especializado en atención de menores, pues lamentablemente muchos no piensan como él.

Batalla tiene 32 años, de los cuales ha trabajado cuatro para la CCSS. Él inició como médico general en el Hospital Nacional de Niños, lugar en el que también fue residente de pediatría.

“Cuando se dio la oportunidad de hacer el servicio social por un año, decidí venirme al área de salud Talamanca – Hone Creek para ofrecer mis conocimientos, aprender y conocer las realidades de las personas más humildes y de menos recursos económicos del país” expresó.

Este valiente pediatra espera hacerle honor a su apellido, ya que piensa dar una buena batalla para que los niños de esas zonas crezcan bien y tengan una atención integral.

“Iré más allá de la atención de las enfermedades, junto al equipo de salud de la sede de ebáis de Alto Telire procuraremos la prevención de la enfermedad y la promoción de la salud. Ahora tendremos una visión diferente de cuáles son las cosas que afectan a la niñez en este cantón limonense” agregó el especialista.

Batalla está alquilando su propio apartamento en Puerto Viejo, a unos 7 kilómetros del área de salud de Talamanca, y espera visitar a la familia de a cuerdo a la calendarización de las giras que debe realizar a los pequeños centros de salud de los pueblos indígenas.

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Primer contacto

El médico hizo recientemente la primera expedición a Talamanca y en ella participó un selecto grupo de la seguridad social costarricense, entre ellos el doctor Alberto Barrantes Arias, una enfermera, una promotora de salud, un compañero de redes, un asistente técnico de atención primaria y un técnico de Farmacia. Todos con experiencia en la zona.

“En este primer viaje me estoy empapando de cuáles son las limitaciones y oportunidades de mejora para implementar cambios y por supuesto ofreceré consulta a todos los pacientes pediátricos que acudan al ebáis para valorar el control del crecimiento y desarrollo normal, así como identificar patologías, dar tratamientos desde acá o referirlos a un segundo o tercer nivel de atención” explicó Batalla.

El doctor Wilmal Rojas Molina, director de la red de prestación de servicios de salud de la región Huetar Atlántica, resaltó la llegada del especialista al área de salud Talamanca, ya que desde hace diez años no contaban con un pediatra debido el faltante de especialistas.

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“Al ser Talamanca una zona tan alejada, con territorios tan amplios, con tantas dificultades de comunicación y con mucha enfermedad pediátrica es realmente valioso y necesario un especialista en pediatría.

"Para mí es de mucho agrado y de gran impacto que el doctor Batalla aceptara venirse a esta zona del país que tanta necesidad tiene. Conocí personalmente al doctor Batalla y la primera impresión que me dio es que es un funcionario con mucha mística, humanismo, compromiso y profesionalismo. Debo destacar que este especialista vino a Talamanca por su propia convicción de servir a y aportar a estas comunidades indígenas” dijo el doctor Rojas.

Familia orgullosa

La familia Batalla Garrido también expresó su alegría por ver a uno de sus integrantes crecer y aseguró que apoyará a Santiago siempre y esté donde esté.

“Es un enamorado de las culturas, de la diversidad y de los niños. Siempre ha tenido mucho contacto con el mundo externo y cuando se dio la oportunidad de irse a Talamanca no lo dudó. En este momento tiene el reto de comunicarse y servir a una cultura distinta a la suya. Estoy muy orgulloso de él por lo que hace por los niños y por la población indígena costarricense” dijo Alejandro Batalla, papá de Santiago.

Por su parte Helena Garrido, mamá del médico, dijo que se siente muy orgullosa de la decisión que tomó su hijo.

“Estoy fascinada de que Santiago dé un aporte a la salud de los niños que tienen menos acceso a los servicios que tanto necesitan. Me parece maravilloso que la Caja fomente que los equipos de salud se trasladen hasta donde están las poblaciones que tanto requieren los servicios. La felicidad que transmite mi hijo por estar haciendo esta labor me hincha el corazón” comentó.

“Qué bueno que Santiago tenga esta experiencia de apoyar a comunidades y personas que tanto lo necesitan, no dudo que su vivencia será de valor, aprendizaje e impacto” expresó Mariano Batalla, hermano del especialista.