Los cuestionamientos contra las empresas Meco y H. Solís tras los escándalos de los casos Cochinilla y Diamante habían hecho que el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) incluyera unas claúsulas que impedían la participación de ambas en los próximos procesos licitatorios.
Sin embargo, el Conavi echó marcha atrás y las eliminó, por lo que pese a estar involucradas en aparentes actos de corrupción, podrán seguir participando por hacerse con los contratos de obra pública para el mantenimiento de las vías nacionales.
Semanas atrás, la directora interina del Conavi, Hannia Rosales, explicó que la conservación de la red vial se realizará mediante minicontratos por ¢152 millones para labores específicas y agregó que se le dará prioridad a las empresas más pequeñas.
El mantenimiento de la red vial pavimentada se encuentra prácticamente paralizado desde febrero de este año, cuando vencieron los últimos contratos que estaban vigentes desde el 2016.
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