Carla Lezano y Pablo Quesada quieren que su hijo Abel, de tan solo 10 meses de edad, crezca viendo como en su país, los derechos para las personas de la comunidad LGTBIQ son una realidad y se respetan, por eso se apuntaron a la Marcha de la Diversidad de este domingo.
La pareja llegó con su bebito y su perro Loui minutos antes del inicio de la marcha. Entre el mar de gente que se unió a la actividad, ambos observaban cómo, desde su punto de vista, se va construyendo una nación sin prejuicios y en la cual todas las personas merecen que se respeten sus creencias y sus ideales.
“Es la primera vez que venimos y considero que es importante participar en este tipo de actividades porque es un tema cultural que no sólo se da en Costa Rica, sino en muchos países y creemos que el país debe avanzar hacia la igualdad de oportunidades”, comentó Pablo.
Amigos en mente
Por otro lado, Carla expresó que también se sumaron a la marcha como una muestra de apoyo a sus conocidos que forman parte de la comunidad sexualmente diversa.
“Vivimos en Sabana Sur y el clima se prestó para venir. Hemos visto mucho orden, pero sobre todo mucho amor, lo que nos parece maravilloso, y sentimos que este año han llegado muchas más personas que en años anteriores”, agregó Carla.
Pablo explicó que años atrás no acudieron, pero sí se mantuvieron al tanto de las actividades que hubo.
Carla consideró que la idea de apoyar la marcha es darles respaldo a las distintas iniciativas por un país más equitativo.
“Todos tenemos derechos y es importante que se respeten”, señaló Lezano.