Desde las 6 de la tarde de este jueves 7 de diciembre brillan las 20 mil bombillitas que iluminan el arbolito de Navidad del Hospital Nacional de Niños.
En medio de cientos de familias y con los niños de protagonistas, tanto dentro como en las afueras del hospital, hubo alegría, sorpresa, diversión y magia navideña antes, durante y después de la iluminación, evento que todavía sigue significando el banderazo de inicio de la Navidad.
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Doña Viviana Castillo, con sus hijas, fueron de las primeras en llegar a esta emblemática actividad. Esta vecina de Purral de Goicoechea estuvo disfrutando con sus angelitos, quienes brincaban, bailaban y celebraban la salud y la vida.
Doña Vivi nos contó que tiene cuatro años de venir a la iluminación porque el evento le sirve para darle muchas gracias a Dios de lo bien que ahora están sus pequeñitas.
“Celebramos la vida porque en el 2018 mi hija menor estaba internada cuando iluminaron el arbolito. En verdad que es muy duro estar del otro lado. Ver la iluminación del otro lado de las ventanas es tremendo.
“Mi hija menor, Ashly Urbina, sufrió una fuerte infección en sus pulmoncitos en el 2018, ella tenía 11 meses y realmente se me puso grave, incluso yo llegué a pensar lo peor. Gracias a Dios se recuperó”, comentó.
Eso no es todo, la otra hija, Kendra, de 8 años, también estuvo internada en el Hospital de Niños por una infección en un riñón.
“A ellas les encanta venir y yo las traigo con mucho amor porque me encanta verlas alegres, disfrutando y hasta bailando con las actividades.
20 mil bombillos iluminan el arbolito.
“Nosotras llegamos a las 11 y 30 de la mañana, éramos de las primeras porque no nos queríamos perder nada de la fiesta de la iluminación. Esta iluminación nos recuerda siempre lo importante de la salud, lo importante de disfrutar cada día de la vida”, aseguró.
Cuando el arbolito de Navidad por fin encendió sus miles de lucecitas a Kendra y Ashly también es les iluminó la cara.
“Vea eso, vea esa sonrisota de mis hijas, es por eso que vengo todos los años. Yo las tuve aquí mismo, pero llorando por la enfermedad. Ver esa luz de alegría es todo para mí.
“No solo hoy con la iluminación celebramos, tratamos de pasar a ver el arbolito todas las veces que podamos y siempre ellas se acuerdan que estuvieron internadas y es ahí cuando rezamos por la salud de todos los niños del país y el mundo”, dijo.
Fiestón
El principal objetivo de iluminar el arbolito de Navidad más grande del país (tiene unos 20 metros de alto) es llevarle alegría a los aproximadamente 230 pequeñitos que están internados en salones de medicina, cirugía, cuidados intensivos, neonatología, lactantes menores y lactantes mayores e infectología, de acuerdo al dato que nos dio el director del HNN, Carlos Jiménez.
Jiménez explicó que este año a pesar de que se están haciendo algunos trabajos de mejoras en el frente y alrededores del HNN, se hicieron todos los esfuerzos necesarios para poder llevar a cabo esta actividad.
“Estamos muy felices de celebrar un año más esta hermosa tradición, que contagia de alegría a nuestros pacientes hospitalizados y sus familias, así como también es disfrutada por la niñez en general, llevando en sí misma un mensaje de ilusión y esperanza sobre todo a las familias que deben pasar la Navidad lejos de su hogar”, dijo.
Dentro de las instalaciones del HNN solo se permitieron 350 personas y la gran mayoría de los que ingresaron donaron un juguete para los niños internado en el centro médico.
59 años iluminando
José Mario Jara, gerente general de la Compañía Nacional de Fuerza y Luz dijo: “Para la Compañía es un orgullo participar de esta celebración llevando luz y esperanza a las familias que deben vivir la Navidad en el Hospital de Niños.
“Es un honor llevar alegría al personal de esta noble institución que se entregan cada día; porque al igual que ellos, nosotros buscamos mejorar la calidad de vida de cada uno de los habitantes de este país.
“Durante 59 años hemos estado acompañándolos y esperamos seguir aportando nuestro trabajo que con tanto cariño realizan cada uno de los trabajadores de Fuerza y Luz y es resarcido con los rostros de alegría de las familias cada diciembre”, agregó.
Este año la iluminación fue dedicada a las señoras Elsa Castro Badilla, Lidieth Chaves Rojas e Ivette Argüello Abarca, amigas del Hospital Nacional de Niños y que, gracias a ellas, el hospital se ha embellecido con las decoraciones en la época navideña, trabajo que realizan durante varios meses con mucha dedicación y compromiso.