La Navidad y el Año Nuevo sorprendieron a doña Ivannia Fallas y a su familia de una manera muy dolorosa, al ver que su hijo Luis Anthony iba perdiendo las ganas de disfrutar de estas fiestas y su salud se complicaba poco a poco.

Exámenes iban y venían y, luego de muchos análisis, en los primeros días del 2024, a Fallas le confirmaron que su niño tenía leucemia. Desde el 6 de enero, este muchachito de 12 años recibe quimioterapia todos los días en el hospital de Niños y, afortunadamente, su salud va en mejoría.

Este jueves 15 de febrero se conmemora el Día Internacional del Cáncer Infantil y por eso doña Ivannia, quien es vecina de Pérez Zeledón se abrió con La Teja para compartir su testimonio y mostrar que, pese a las dificultades no pierde la fe, más que gracias al diagnóstico temprano, este campeón va superando esta enfermedad.

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Angustia

Fallas recordó que desde mayo del año pasado, Luis Anthony sufría constantes dolores de cabeza y por eso lo llevó al hospital Escalante Pradilla, de Pérez Zeledón, en donde le dijeron que el joven padecía de migraña y lo llevaba una vez al mes a controles en el Ebáis de la localidad.

En ese entonces, Luis Anthony estaba en sexto grado y se mostraba como un chiquito alegre, al que le encantaba ayudarle a su abuelo Jorge Luis a arreglar carros y los videojuegos. Pero después del 25 de diciembre, los dolores de cabeza eran insoportables y, el 1° de enero, los médicos del hospital de Pérez decidieron que lo mejor era enviarlo al Hospital de Niños para que fuera valorado.

En ese centro médico le hicieron varios exámenes, se sometió a dos TAC, hasta le hicieron pruebas de covid-19 y dengue y, aunque faltaba un examen, a su mamá le dijeron que lo más probable era que su hijo tuviera cáncer, noticia que le confirmaron días después.

“Recibir esta noticia fue muy doloroso, demasiado, porque Luis Anthony siempre ha sido un chiquito servicial, muy activo y después del 25 de diciembre solo quería estar acostado, durmiendo, pedía que el cuarto estuviera cerrado, que no recibiera luz. La familia ha sufrido mucho con esta enfermedad”, manifestó.

Este niño, que es el menor de 3 hermanos, y su mamá, están desde el 5 de enero en San José, en la casa albergue de la Asociación Lucha Contra el Cáncer Infantil (ALCCI), que se ubica a un costado del Hospital de Niños.

Actualmente, Luis Anthony recibe una sesión diaria de quimioterapia y pese a la angustia y las preocupaciones, el lunes pasado recibieron una excelente noticia.

163 niños fueron diagnosticados con cáncer el año pasado.

“Se ha sentido muy bien, los dolores de cabeza han disminuido considerablemente y nos dijeron que gracias a Dios la leucemia ya no está en su cuerpo, pero seguirá en tratamiento un mes más para eliminar cualquier célula que esté como escondida y evitar que el cáncer reaparezca.

“Mi familia, la asociación y muchas personas más están en esto con nosotros y vamos saliendo adelante. Han sido meses muy difíciles, me he tenido que contener para mostrarme fuerte, porque al inicio decía: ‘¿Por qué a mí?’, ¿por qué a él?’, pero afortunadamente la enfermedad se detectó a tiempo”, comentó.

Alerta

Gabriela Soto, jefa del servicio de hematología del Hospital de Niños, confirmó que el año pasado se diagnosticaron 163 casos.

“El cáncer infantil es muy constante, cada año se detectan entre 155 y 165 casos y de esa cantidad, entre el 75 y el 80 por ciento de los pacientes logran vencer la enfermedad”, dijo.

Soto informó que la leucemia representa alrededor de una tercera parte de todos los cánceres infantiles. Los otros tumores malignos más comunes son los linfomas y los tumores del sistema nervioso central.

Además, recientemente se muestra un aumento de tumores en los ovarios o cáncer de testículo, que se desarrolla en preadolescentes.

“Aquí hacemos un llamado a los papás o cuidadores de niños a estar muy presentes, detectar los síntomas a tiempo, que son muy específicos, como dolor de cabeza y vómitos durante varios días, mancha blanca en el ojo cuando le da la luz, dolor persistente en huesos, articulaciones y músculos, fiebre sin causa aparente por más de dos semanas, moretes o puntitos rojos en la piel y palidez marcada, crecimiento de ganglios o masas en diferentes partes del cuerpo y pérdida de peso y apetito, entre otros.

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“Además, algunas niñas tienen dolores en el abdomen o inflamación en la zona abdominal y eso se puede relacionar con estos tumores que se desarrollan en los ovarios”, agregó.

Por otro lado, Mayra Peraza, gerente general de ALCCI, recordó que es importante sensibilizar sobre los síntomas de estas enfermedades, porque un diagnóstico temprano puede ayudar a los pequeños a superar la enfermedad.

“Trabajamos muy de la mano con el Hospital de Niños, ahorita estamos apoyando a 43 niños en nuestro albergue, quienes reciben, con sus papás, atención integral para vivir el día a día del cáncer.

“Hacemos todo lo que sea necesario, para que las familias sientan el calor de hogar y tengan todas las comodidades mientras enfrentan este proceso”, agregó.