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Luis Guillermo Solís revela los problemas de salud que le dejaron los 30 kilos que subió siendo presidente

El exmandatario se confesó con La Teja, contó detalles curiosos sobre su vida y calificó la labor de Rodrigo Chaves

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Luis Guillermo Solís, expresidente de la República, se confesó con La Teja y contó dónde está viviendo ahora, cómo sigue de las operaciones de la próstata y la cadera que le hicieron al final de su gobierno, qué sintió el día que le pegaron una madreada cuando fue a comprar el pan y hasta qué piensa del gobierno de Rodrigo Chaves y si lo piensan incluir al chat de expresidentes cuando termine el mandato.

El exmandatario fue muy sincero y solo se negó a contestar una de las preguntas que le hicimos.

Luis Guillermo Solís regresó a Costa Rica en setiembre pasado y cuenta cómo le está yendo. Foto: Cortesía. (Cortesía de Luis Guillermo Solís)

—¿Dónde está viviendo ahora y a qué dedica su tiempo?

Regresé a Costa Rica con Mercedes e Inés en setiembre pasado, después nos fuimos a España unos meses para que Mercedes pudiera estar con la familia, a los hermanos tenía años de no verlos y en febrero de este año regresamos ya definitivamente a Costa Rica.

Originalmente Mercedes, Inés (su hija menor) y yo habíamos pensado irnos un año a la universidad Internacional de Florida en Miami, luego se extendió a dos, después a tres, vino la pandemia y bueno, al final nos quedamos más, pero siempre tuvimos claro que queríamos regresar y ya estamos en barrio Escalante, donde siempre.

Ya estoy retirado, pero tengo algunas ocupaciones como ayudar en tesis y en el proyecto de un libro de un conocido.

— ¿Qué fue lo más difícil de ser presidente de Costa Rica?

Nunca había estado en cargos públicos de ese nivel. Nunca fui ministro, nunca fui diputado, nunca fui canciller, nunca fui nada, yo en broma decía que la única elección que había ganado antes de la Presidencia de la República fue de la de ser presidente de mi colegio. Sí tuve cargos en el Gobierno y fui secretario general del Partido Liberación Nacional, pero nunca tuve un cargo de ese tamaño. Acostumbrarme a eso, la curva de aprendizaje, fue una cosa importante.

También fue difícil lidiar con los efectos del bipartidismo, recordemos que mi triunfo en el PAC fue la primera victoria que tuvo un partido que no estuviera asociado a los dos bloques históricos del partido (PLN y PUSC).

En tercer lugar estaba el reto de encontrar un país que no estaba en su mejor momento, había mucha insatisfacción en la calle, bloqueos, manifestaciones, hubo que dialogar y lidiar con un Estado que estaba ya muy endeudado.

Inés, la hija menor del exmandatario, ya está en cuarto año del colegio. Foto: Cortesía. (Cortesía de Luis Guillermo Solís)

— ¿Qué nota se pondría usted?

Eso es muy difícil de responder porque la nota conlleva un balance que, como profesor, yo siempre trataré de hacer objetivamente y en este caso yo no puedo ser objetivo porque sería actor y evaluador al mismo tiempo.

— ¿Hay alguna deuda con el país que le quite el sueño?

Mire, quitarme el sueño no, pero sí hay cosas que uno sabe que no se pudieron hacer, cosas muy puntuales, como por ejemplo la carretera que va de Puriscal a Parrita, que siempre fue una gran ilusión para mí porque creo que es un gran proyecto y que es una hermosísima posibilidad para darle acceso a la gente que vive en esa zona desde la Cangreja hasta el mar.

Hay otros temas que yo hubiese querido trabajar más, por ejemplo tener muchísima más incidencia en la eliminación de la pobreza extrema.

Luis Guillermo Solís quiere a Nahla como a una nieta más. Foto: Cortesía. (Cortesía de Luis Guillermo Solís)

— ¿Lo vacilan todavía con la avispa que se comió?

(Ríe) Fue algo muy muy circunstancial y muy muy bonito, muy vacilón, son anécdotas que quedan ahí. Claro, todavía me molestan y cuando quiero reírme busco en Internet el video para verme otra vez cuando me comí la avispa.

— Siempre llamó la atención que usted se vestía de diferentes personajes, ¿por qué lo hacía?

Usted está siendo muy fina con sus palabras, la acusación mayor era que yo era un payaso y me vestía de distintas cosas. Prefería usar botas que usar zapatillas, no me gustan las tenis entonces las botas que me regaló la policía eran las que siempre usaba con pantalones cargo y una camisa especial que hacía que secara el sudor rápido y un sombrero por razones obvias (se toca la cabeza cala), eso era lo que me ponía para las giras.

Me vacilaron y me criticaron cuando me vestí con el uniforme de comandante de Bomberos o cuando me puse alguna gorra de cuerpos policiales, lo hacía con respeto a la institucionalidad, no por andar ‘facheteando’ como dice alguna gente. El uniforme de bomberos me lo puse solamente en dos ocasiones: una para una celebración formal en el Teatro Nacional y otra en el funeral de un comandante de Bomberos veterano, me pareció que era lo correcto. Usé mucho la jacket que me dio Vigilancia Aérea, es una prenda muy emblemática, era muy cómoda y muy funcional.

Expresidente Luis Guillermo Solís cuenta los males de salud que le dejó la presidencia

— Vimos hace poco un video de un hombre que le pegó una madreada cuando usted salió a comprar pan, ¿son comunes ese tipo de situaciones?

Esta es la primera vez, yo no tengo protección, volví a hacer el ciudadano Solís. Eso fue hace unas tres semanas. No sé quién es, no lo conozco, ya estaba a 200 metros de mi casa cuando sacó el celular y empezó a decirme cosas, me sorprendió porque mucha gente toma videos donde voy caminando, les gusta la idea de que un expresidente pueda andar caminando por la calle como si nada, pero sé que las cosas están cambiando, que hay que tener cuidado.

Hay mucha insatisfacción en la gente y muchos no están en disposición de hacer concesiones.

— En el tema de su salud, ¿qué le dejó la presidencia de la República?

Bueno, lo primero fue unos 30 kilos de más, fue mucho lo que aumenté de peso, ya he logrado bajar bastante pero todavía me falta. Eso me produjo otros problemas como reflujo, irritación estomacal.

Se agudizaron por ese tema y el estrés, el problema de la cadera, que venía desde antes la presidencia, y lo mismo con el de la próstata; dejé de dormir bien durante mucho tiempo. Antes de ser presidente dormía muy rico cuando llovía, pero con el huracán Otto eso se acabó, hasta hace poco tiempo he vuelto a disfrutar la lluvia, porque cada vez que había un aguacero me despertaba sobresaltado pensando que había una inundación en algún lado.

La próstata me la operaron cuando todavía era presidente, no podía esperar más y el reemplazo de cadera lo hice cuando terminé el gobierno, estoy muy bien de eso, la terapia que recibí fue muy buena.

Los trajes que usó el expresidente siempre dieron de qué hablar. Foto: Archivo. (Archivo)

— ¿Qué piensa de la labor que está haciendo el presidente Rodrigo Chaves?

Bueno, ahora sí le voy a dar una nota: le doy un tres. Se ha dado mucha confrontación, mucha división y poca obra. Hay dos cosas grandes que me preocupan, una es el ataque incesante del señor presidente y del Poder Ejecutivo a la institucionalidad, pareciera una deliberada acción de deslegitimar y socavar a los poderes del Estado. Ha habido una confrontación muy desagradable y muy pública con respecto a la Asamblea Legislativa.

Lo otro que me parece incluso más grave todavía son los ataques al Poder Judicial, para mí el Estado de Derecho es una pieza angular insustituible en un régimen democrático.

Esa crispación, esa polarización, ese fundamentalismo, esa rabia contra todo no lo valoro bien, me parece que hay que hacer un esfuerzo de todo lado, no solamente de parte del gobierno, sino también de la oposición y de la ciudadanía en general para volver a un momento de mayor tranquilidad.

Luis Guillermo Solís se siente decepcionado del gobiernos de Rodrigo Chaves

— ¿Cree que la actitud del mandatario está generando violencia social?

El señor presidente busca la confrontación, la polarización, el generar ese tipo de reacciones porque han logrado medir que genera en un mundo de acceso casi ilimitado, de las redes sociales, reacciones muy positivas, entonces alimenta eso y además los refuerza con troles y con hackers, esto puede traer unos beneficios para él, pero mucho perjuicio para la paz social.

— ¿Cómo ha estado el chat de expresidentes ahora con todo lo que ha hecho Rodrigo Chaves? ¿Hablan mucho de él?

En realidad no, nos atrevimos a enviar al señor presidente una sugerencia respecto de no apoyar a la candidatura del secretario general que resultó electa en el SICA, eso lo hicimos muy al inicio de su gestión y el presidente fue muy contundente, respondió públicamente, es la última vez. Es que no es un chat activo así como en los que se mandan cosas y mensajes todos los días, se usa con mucho cuidado, mucha mesura. Hay momentos en donde se activa y se opina.

— ¿Piensan agregarlo al chat cuando termine el mandato?

Bueno, es un chat de participación voluntaria, a nadie se le obliga a estar aquí, lo que pasa es que es solo de expresidentes, aquí no hay escapatoria, las personas que ocupamos ese cargo estarán siempre invitadas al chat, no hay exclusiones de ningún tipo, por supuesto que cuando don Rodrigo termine su gestión se convertirá en uno más, si él quiere participar pues participa y si no, pues no.

Solís lleva ahora una vida tranquila y muy en familia. Foto: Cortesía. (Cortesía de Luis Guillermo Solís)

— ¿Se volvería a lanzar para ser presidente?

No, no me volvería a lanzar para ningún tipo de puesto de elección popular.

— El caso del cementazo ensució su gobierno y usted en un momento hasta fue investigado, ¿qué le dice a la gente que todavía siente que usted estuvo involucrado?

No tengo nada de qué avergonzarme, facilitamos lo que hizo falta para las investigaciones, siempre he creído que en esos casos hay que colaborar, especialmente si uno no tiene nada que ver, pero claro, es bien complicado porque a uno la condenan en las redes, lo condenan los titulares.

— Y con respecto al tema del hueco fiscal que dicen que usted ocultó y de la acusación de la Fiscalía sobre el caso Bancrédito ¿qué tiene que decir?

Cuando estaba en Estados Unidos y me pidieron que viniera a dar cuentas lo hice con gusto. He sido informado de una acusación planteada por parte de la Fiscalía por la decisión del cierre de Bancrédito. No deja de sorprenderme la decisión del Ministerio Público de acusar en este caso, pero la recibo con serenidad. Ahora procede continuar con el proceso ante los tribunales de justicia. Rechazo de forma categórica los cargos que se me imputan.

Rocío Sandí

Rocío Sandí

Licenciada en Comunicación de Mercadeo de la Universidad Americana; Periodista de la Universidad Internacional de las Américas, con experiencia en Sucesos, Judiciales y Nacionales. Antes trabajó en La Nación y ADN Radio.

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