La Defensora de los Habitantes, Catalina Crespo, recorrió este lunes el Liceo de Chacarita, en Puntarenas, junto con Jonatan Sandí, jefe de Bomberos del Pacífico y José Ángel Castillo, jefe de la estación de bomberos de El Roble.
Los tres comprobaron el pésimo estado de las instalaciones.
Sandí advirtió del peligro que corren los 1.700 estudiantes que van a ese colegio: mil de día y el resto en la noche. En una escala de uno a diez, le dio un once al riesgo de que ocurra un incendio.
El liceo no cuenta con una instalación eléctrica como la que exige el Código Eléctrico Nacional, en varias aulas las cajas de fusibles están sin tapa, hay conexiones eléctricas hechizas, cables sueltos y contactos que impiden que se corte la ectricidad en caso de un cortocircuito.
“Hemos evidenciado un sistema eléctrico muy dañado, lo que puede ocasionarnos una emergencia. No hay extintores, parte del edificio está a punto de caer, no hay un plan de seguridad ni rutas de evacuación, no hay lámparas de emergencia", alertó el bombero Jonatan Sandí.
Y como si todo eso fuera poco hay paredes tan falseadas que se mueven como gelatina con solo menearlas con la mano.
Además, los cielorasos y el techo están en muy mal estado, hay fugas de agua, poca iluminación y ventilación y baños sucios.
Los funcionarios de la Defensoría también visitaron la Escuela de Barranca; el Liceo del Sur, en barrio Cuba, y la escuela de Cinco Esquinas de Carrizal de Alajuela (que tiene riesgo de que le caiga un terraplén) para ver cómo andan las instalaciones y el servicio de comedor, entre otros.
Estas fueron las primeras cuatro inspecciones de las 50 que esperan realizar.
Si la escuela a la que van sus hijos está en mal estado puede reportar a la Defensoría al 800-258-7474 o al correo defensoria@dhr.go.cr
LEA MÁS: Escuela donde votó Carlos Alvarado es un tugurio a punto de incendiarse