Si su licencia está a pocos meses de vencer, mejor no se la juegue y saque una cita para renovarla lo antes posible, ya que la fila es de meses.
La Ley de Tránsito especifica que cuando a un chofer se le vence la licencia, se expone a varios castigos. El primero es a una multa de ¢26.344.
Si lo que maneja es un carro particular, el castigo queda hasta ahí, pero si es un conductor de transporte público también se le retiran las placas del vehículo. Esto también aplica en caso de que se agarre a un chofer con la licencia suspendida.
Las otras razones porque las que los tráficos le pueden quitar las placas son estas:
- Circular sin haber pagado el derecho de circulación.
- Cuando una unidad de transporte público tenga la rampa para personas con discapacidad en mal estado.
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- Cuando se brinde servicio ilegal de transporte público.
- Por disponer del permiso temporal de manejo, pero conducir sin un acompañante con licencia, según lo indica la ley.
- Cuando se conduce más de tres meses con una licencia extranjera.
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- Cuando el conductor irrespete los requisitos relacionados con el transporte de materiales peligrosos y explosivos.
- Cuando la totalidad del sistema de luces no funcione, salvo que se pueda reparar en el lugar.
El hecho de que le quiten las placas a un vehículo siempre genera incomodidad porque tiene que pasar varios días a pie mientras hace los trámites para la devolución. Incluso no puede ir a retirarlas cuando quiera, sino que tiene que sacar una cita previa para recuperarlas.