Este domingo 4 de febrero será quizá uno de los más ajetreados que haya tenido en su vida doña Laura Moscoa, esposa del candidato presidencial por Restauración Nacional Fabricio Alvarado, ya que tiene que multiplicarse para ser candidata a primera dama, madre y esposa al mismo tiempo.
Moscoa, no ha tenido días fáciles debido a los ataques en su contra por el video en el que aparece hablando en lenguas, pero admite que ha disfrutado mucho la campaña.
“He estado supertranquila, sonriendo, porque creo que ante la adversidad hay que vencer el temor. No tengo porque esconderme, estoy feliz y segura de quien soy porque no he robado, no he mentido” comentó Moscoa.
“Estoy muy segura, incluso me tuve que reír de uno que otro meme porque hay que seguir adelante”, indicó.
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Aunque sus labores de madre no terminan porque aunque anda en plena campaña, a veces le toca correr para buscar un baño para su pequeña hija.
“En un principio me ofrecieron hacer el desayuno, me ofrecieron unas niñeras para cuidar a las chiquitas, pero creo que no hay motivo para cambiar mi manera de ser, ya que las mujeres somos múltiples” agregó con una gran sonrisa.
Doña Laura fue la que preparó el pinto, levantó a sus pequeñas y las alistó para que todo mundo estuviera listo a tiempo.
“Si se da, las cosas van a cambiar para bien, el pensamiento (de ser Primera Dama) se empezó a generar cuando mi esposo empezó a crecer en las encuestas”, reconoció Moscoa, quien reconoce que estaban listos para todo.
Incluso se habían preparado para lo ataques de los candidatos rivales y de la gente que no los apoya.
“Ha pasado de todo, pero realmente si algo nos ha enseñado Dios es que el mal no se paga con mal.