Es probable que usted nunca haya escuchado el término “violencia vicaria”, pero podría estarla sufriendo.
Un proyecto de ley presentado por el diputado Gilberto Campos, del Partido Liberal Progresista, explica que la violencia vicaria es la “acción u omisión cometida por parte de quien mantenga o mantuvo una relación de matrimonio, unión de hecho o alguna relación sentimental con la mujer, cuyo objetivo sea causar un daño emocional, psicológico o patrimonial a la mujer, a través de la afectación o daño físico, psicológico, emocional o patrimonial a un descendiente, ascendiente, pariente colateral consanguíneo, por afinidad o adopción hasta el cuarto grado inclusive, dependiente económico, animal de compañía o bienes muebles o inmuebles de la víctima”.
La propuesta detalla que la víctima de violencia vicaria gozará de las mismas medidas de protección que contempla la legislación para aquellas mujeres que sufren violencia doméstica.
El proyecto reforma la Ley contra la Violencia Doméstica para incluir la violencia vicaria. Uno de los objetivos del proyecto es que el Instituto Nacional de las Mujeres fomente la educación y capacitación del personal en la administración de justicia, policial y de otros funcionarios responsables de la aplicación de la ley, así como del personal encargado de aplicar las políticas para prevenir, sancionar y eliminar la violencia vicaria.
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Además, el Inamu deberá desarrollar un plan nacional que coordine, como un sistema unificado, las instituciones que puedan ofrecer servicios especiales a las personas agredidas por violencia vicaria.
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“Muchas mujeres en Costa Rica sufren en silencio diferentes manifestaciones de violencia. La vicaria es una de ellas. Ese tipo de violencia es el que ejerce una pareja o expareja sentimental de la mujer, dañando a terceros para perjudicarla de manera irreversible, para generarle un daño que no pueda ser reparado. Este tipo de violencia es comparable con la tortura, en donde se realizan acciones sistemáticamente para perjudicar la reputación de la mujer, para alejarla de sus hijos, para quitarle a sus hijos, para dañarla económicamente, incluso perjudicando sus bienes materiales”, justificó el diputado.