La jueza costarricense Elizabeth Odio Benito fue elegida este viernes como la nueva presidenta de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Odio asumirá el cargo a partir del 1° de enero del 2020. Esta es la segunda ocasión en la que una mujer presidirá dicha corte, según destacó el presidente en ejercicio, el juez Eduardo Ferrer.
El nombramiento es por dos años y puede ser reelegida para un periodo igual.
La costarricense es miembro de la CIDH desde el 2016 y cuenta con una destacada trayectoria de más de 50 años en la defensa de los derechos humanos y el trabajo por la justicia en el ámbito internacional.
Fue jueza de la Corte Penal Internacional (2003-2012) y del Tribunal Penal Internacional ad hoc para la antigua Yugoslavia (1993-1998).
En Costa Rica fue vicepresidenta de la República (1998-2002), ministra de Justicia en dos ocasiones (1978-1982) con Rodrigo Carazo y con Rafael Ángel Calderón Fournier (1990-1994), procuradora General (1978-1982) y ministra de Medio Ambiente y Energía en (1998-2002).
Además, fue embajadora representante permanente ante Naciones Unidas y embajadora jefe de delegación ante la Conferencia Mundial de Derechos Humanos de Naciones Unidas, con sede en Viena (1993).
Ha sido miembro del grupo nacional de Costa Rica de la Corte Permanente de Arbitraje, presidenta del Grupo de trabajo de la Comisión de Derechos Humanos encargado de la redacción del Protocolo Opcional Contra la Tortura (2000-2002).
Doña Elizabeth fue electa en el cargo a sus 80 años.
A ella la acompañará en la vicepresidencia el juez ecuatoriano Patricio Pazmiño