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La comunidad judía en Costa Rica aplaude la decisión de abrir los archivos secretos del Vaticano sobre el pontificado del papa Pío XII (1932-1958) y saber así por qué el sumo pontífice se quedó callado ante el exterminio judío de la II Guerra Mundial.
Joseph Gabriel, presidente de la organización Bnai Brith, que se ocupa del tema de derechos humanos dentro de la comunidad judía en Tiquicia, considera positivo que el papa Francisco haya decidido hacer públicos los archivos en marzo del 2020.
"En esta ocasión nos parece conveniente para que se conozca la historia y se despejen dudas, pues se conjeturan muchas cosas y una acción como esta hará que conozcamos la verdad", opinó.
Igual pensamiento tuvo Luis Fishman Zonzinski, exvicepresidente de la República de ascendencia judía.
"Me parece muy bien, las realidades históricas tienen que ser conocidas, para bien o para mal. Siempre han existido dudas sobre lo que sucedió durante el pontificado de Pío XII, el Holocausto y la Segunda Guerra Mundial. Se ha hablado mucho y por ello es una medida muy sabia del papa Francisco abrir los expedientes y que sean públicos para ser analizados. Los documentos determinarán la realidad", aseguró.
Gabriel reconoció que la comunidad judía le tiene respeto y admiración al Papa Francisco, pero sobre el tema de Eugenio Pacelli las opiniones están divididas.
"Para el pueblo judío la época de la Segunda Guerra Mundial y el Holocausto marcaron una tragedia muy grande donde perdió la vida una tercera parte del pueblo.
“No podemos juzgar acciones u omisiones porque fue una época complicada y convulsa, donde entendemos que la Iglesia también tuvo conflictos. Mucho de eso lo sabremos cuando se abran los archivos, pero lo que sí podemos agradecer es que la Iglesia tuvo gestos muy loables por los judíos, salvaron a muchos judíos en conventos y escondieron muchos niños. De eso hay mucha documentación", indicó Gabriel, quien reconoció que las relaciones entre judaísmo y catolicismo están en buenos términos.
Camino libre
Mauricio Granados, secretario de la Conferencia Episcopal, considera que este es el paso que faltaba para seguir con el proceso de beatificación de Pío XII.
“Consideramos que es una decisión muy sabia del santo padre Francisco, con el ánimo de esclarecer cualquier duda en la causa de beatificación del papa Pío XII, quien se distinguió en todo momento por su talante humanitario y que sin duda va a quedar claro cómo pudo ayudar a los judíos y otros perseguidos por el régimen nazi para escapar de sus perseguidores”, opinó el sacerdote Mauricio Granados, secretario de la Conferencia Episcopal.
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Si bien sus sucesores Juan XXIII (1958-1963), Paulo VI (1963-1978) y Juan Pablo II (1978-2005) fueron canonizados, el proceso de beatificación de Pío XII, lanzado en 2009 por el papa Benedicto XVI, se encuentra empantanado a raíz de las controversias sobre su papel durante la II Guerra Mundial.
El Vaticano suele esperar 70 años después del final de un pontificado para abrir los archivos relativos a esa época, no obstante, la Santa Sede recibió presiones para hacer que la documentación de esta época esté disponible antes, mientras los sobrevivientes del Holocausto siguen vivos.
La institución ha defendido al papa alegando que empleó la diplomacia secreta para intentar salvar vidas.
Pío fue elevado al trono el 2 de marzo de 1939, seis meses antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial. Falleció el 9 de octubre de 1958, en la casa de descanso papal en Castel Gandolfo, cerca de Roma.
