“¿Para qué vas a estudiar, si te vas a morir? Usted no puede porque está enferma”. Esos son solo dos de los comentarios negativos que mucha gente le hizo a Laura Urbina, una joven luchadora que jamás le puso atención a la gente negativa, por eso, logró sacar su bachillerato y disfrutar todos los días de su vida al máximo.
Lau fue diagnosticada con fibrosis quística desde los nueve meses de vida, a principios de noviembre tuvo su último internamiento en el hospital San Juan de Dios, y antes de morir dejó un poderoso y sincero mensaje para otros pacientes que enfrentan esta dolorosa enfermedad.
“Sin duda mi vida ha sido difícil, pero aquí voy saliendo adelante, porque hay que ser fuertes y hacer oídos sordos a las cosas negativas que nos dicen, coger fuerzas de donde parece no haberlas porque sino eso sería dejarnos vencer. Mi mensaje es que vivan el momento y no piensen en el futuro, porque el futuro es totalmente incierto para todos”, expresó Laura.
Sacó el bachillerato
Desde que nació, Laura, quien vivía en Guápiles, le tocó pasar la mayoría de sus días en medio de internamientos. A pesar de esto logró obtener el bachillerato.
Uno de los recuerdos que más amó fue la fiesta de 15 años que le hicieron en el Hospital Nacional de Niños y los paseos familiares al río.
Laura también vivió situaciones difíciles, no solo por su enfermedad sino por la condición económica de su familia.
El doctor Randall Guadamuz, neumólogo y coordinador de la Unidad de Fibrosis Quística del hospital San Juan de Dios, explicó que esta enfermedad se caracteriza por tener una producción de mocos espesos, en cualquier lugar del organismo donde haya secreciones.
Se atienden 80 menores
Desde hace 12 años el hospital San Juan de Dios es centro de referencia nacional para la atención de pacientes adultos de la Caja diagnosticados con esta patología genética; un equipo multidisciplinario se encarga del seguimiento de 20 personas, 11 hombres y 9 mujeres, con edades entre los 18 y 38 años. Además, el Hospital Nacional de Niños atiende actualmente 80 menores con fibrosis quística.
La Unidad de Fibrosis Quística del San Juan de Dios está integrada por el doctor Guadamuz con el apoyo de Farmacia, Salud Mental, Trabajo Social, Terapia Respiratoria, Nutrición y Soporte Nutricional, y en algunos casos Atención Domiciliar.
“Yo tengo comunicación con todos ellos (pacientes y equipo) por medio de WhatsApp, y ante cualquier situación me pueden llamar”, dice el doctor Guadamuz.
Cumpliendo sueños
Sonia Montero, del departamento de Salud Mental del hospital, cuenta que estos pacientes se atienden según la etapas de la enfermedad.
“En un inicio el proceso está enfocado a la perdida de la salud, en aceptar una condición que cambiará la vida”, explica Montero.
Para esto se emplean técnicas de manejo de ansiedad, relajación y programación neurolingüística, luego se enfocan en el sentido de la vida y la aceptación de la muerte.
“No solo se atiende al paciente, también a la familia” explicó la enfermera.
Como parte de este trabajo, Salud Mental busca que los pacientes en fase terminal puedan cumplir sueños, de esta forma a Laura le cumplieron dos: visitar la Basílica de los Ángeles, en Cartago, y el otro dejar un mensaje para las personas que al igual que ella tienen fibrosis quística.
La doctora Elena Gutiérrez, médico residente del San Juan de Dios, organizó, en enero pasado, la visita de Laura y su familia a la casa de la Negrita.
“Fue necesario llevar un tanque de oxígeno grande y silla de ruedas, logramos que nos dieran una explicación detallada en el lugar, ella estuvo feliz.
"Yo lo hice porque Laura me tocó el corazón, ella estaba en un estado avanzado de la enfermedad, pero siempre fue muy animada, me impactó cuando me dijo que ese era uno de sus sueños; me llenó mucho llevarle alegría”, expresó la doctora.
Laura falleció el 10 de noviembre, al lado de su mamá y hermanos, en Guápiles, a los 24 años.