José María Figueres llegó jugando de faruscas (presumido) al debate de Teletica de este jueves, pero sus contrincantes se encargaron de bajarle el piso cada vez que pudieran.
El expresidente sacó pecho diciendo que él entendía que los otros cuatro candidatos del Partido Liberación Nacional (PLN) quisieran que gente que no es liberacionista pueda votar el próximo domingo en la convención porque él va ganando.
“Yo entiendo la posición de ustedes de que venga todo el mundo, porque van perdiendo. El interés es que vengan no liberacionistas a votar por ustedes”, dijo Figueres.
Sin embargo, Figueres no había terminado de decir eso cuando le brincaron los otros precandidatos. Carlos Ricardo Benavides fue el primero.
“Qué prepotencia la de José María, cree que ya ganó y con eso no le hace un favor a nadie. Yo sí quiero el voto de todos los costarricenses, de cualquier partido que sea”, dijo el exdiputado.
Roberto Thompson fue el siguiente en la fila.
“Solo hasta que se cierren las urnas se sabrá el ganador. Es bueno abrir puertas y ventanas para oxigenarse y para conectarse con las nuevas generaciones”, dijo Thompson haciendo referencia a que no es necesario que la persona que llegue a votar tuviera que firmar la adhesión al partido, como lo quiere Figueres.
Rolando Araya, quien hizo reír a medio mundo durante todo el debate con sus ocurrencias, también se la aplicó.
“Ya faltan poquitos días para salir de dudas, José María, no se ponga nervioso”.
Para rematar, Claudio Alpízar le dijo: “fui el primero que se dio un baño de pueblo porque el PLN se convirtió en un club de amigos, el baño es sin firmas de adhesión. Algunos quieren que se firme porque dicen que van ganado, pero es posible que ya hayan pedido apoyo”.
Carnita
El debate de canal 7 estuvo bastante vacilón.
En resumen, Alpízar fue un puro enjache; Figueres, no se junta con la chusma; Thompson, tira para todos lados; Benavides, la gran salvación son las zonas francas y, Araya, pegó como un Ninja, sin mucha bulla y sin ningún miedo.
Por dicha todos tienen claro que el narcotráfico, la corrupción y el desempleo deben ser problemas a atacar urgentemente si llegan a la presidencia, así como todos aseguraron que la educación debe ser el pilar a fortalecer en el corto, mediano y largo plazo.
A pesar de que los cinco tienen diferencias marcadas de qué hacer y cómo hacerlo para reactivar al país tras el frenazo que le pegó la pandemia a la economía, todos entienden que deben meterle mano ya y desde muchos frentes de batalla como con inversión extranjera, zonas francas, incentivos para que la gente la pulsee y apoyo real de los bancos del estado.
Araya habló de una millonada de dólares en oro a extraer cerca de la frontera con Nicaragua; Figueres de energías verdes; Thompson de fomentar que la gente cree su propia empresita; Benavides de cáñamo y Alpízar de diversidad en cultivos de exportación como producir uchuvas.
Al final casi todos dijeron que si pierden apoyarían al candidato que sea electo, el único que dijo que excluiría a algunos fue Alpízar, quien dijo que mandaría de vacaciones a Benavides y a Thompson.
Además, para terminar de hacerle el feo a Figueres, ninguno le aceptó la invitación del cafecito el domingo en el Balcón verde luego de que se cierren las urnas.