El alcalde de San José, Johnny Araya, llegó este martes a la Asamblea Legislativa a hablar sobre el problema de la basura que vive el Gran Área Metropolitana y terminó metido en un tremendo pleito.

El jefe del municipio josefino reconoció que hay mucho por hacer en el tema de la recolección y tratamiento de residuos sólidos, pero aseguró que eso no debe ser una responsabilidad exclusiva de las municipalidades, sino también del gobierno.

Araya dijo que cuando inició la administración Chaves Robles sostuvieron reuniones con el Ejecutivo para tratar el tema del inminente cierre del relleno sanitario de La Carpio, pero no le dieron pelota.

El alcalde josefino asegura que desde hace años andan en busca de soluciones para el tratamiento de la basura. También mencionó que en el 2018 hicieron una licitación para buscar una empresa que se encargara del tratamiento de residuos sólidos, pero el asunto no salió bien y fue declarada infructuosa. En el 2021 hubo una nueva licitación que fue dada a la compañía EBI y que tiene una vigencia de cuatro años.

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Araya dice que la municipalidad sigue en busca para una solución permanente para el tratamiento de la basura ya que saben que el botadero El Huaso, en Aserrí, donde van a parar los desechos de 35 municipalidades, está a pocos años de terminar su vida útil.

Entre los planes que analizan está un megaproyecto que iría de la mano con el ICE, pero que aún está solo en conversaciones.

A diputado se le fue la mano

Varios legisladores fueron críticos porque aseguran que el alcalde lleva mucho tiempo al frente del municipio y, según ellos, no ha hecho lo suficiente para acabar con los problemas de los desechos sólidos.

Al que sí se le pasó un poco la mano fue al diputado David Segura, de Nueva República, que se dejó decir que Johnny Araya era un mentiroso y un ladrón.

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“A mí no me duele que Liberación gane, a mí me duele que la gente esté sufriendo por políticos como ustedes, corruptos, que lo que llegan es a robarse el dinero, estén gobernando y estén mal utilizando los recursos”, dijo Segura.

Las palabras del legislador enojaron al alcalde, quien le exigió respeto y que no se atuviera a su inmunidad para decir lo que quisiera, pero quien más se enfureció fue Óscar Izquierdo, diputado y jefe de fracción de Liberación Nacional, ya que pidió la palabra y le exigió a Segura que pusiera una denuncia de lo que acababa de decir.

“Si usted tiene las pruebas, usted, hoy mismo, presenta la demanda y sino, usted es un mentiroso y de aquí en adelante cada vez que usted haga uso de la palabra le diré mentiroso, porque solo un mentiroso se atreve a decir eso si no tiene las pruebas. Le pido por favor que sea consecuente con sus palabras”, retó Izquierdo mientras Segura trataba de hacer uso de la palabra también, por lo que el diputado liberacionista le pidió que tuviera decencia y lo dejara terminar.

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“Yo no voy a permitir que usted venga a decir mentiras a los costarricenses cuando no tiene pruebas, entonces, si tiene pruebas presente la denuncia hoy mismo y sino, guarde silencio de aquí en adelante porque usted es un mentiroso absoluto”, agregó Izquierdo.

Luego el diputado de Nueva República replicó y dijo que Johnny había llegado a mentir porque había dicho que en San José estaban en funcionamiento 17 camiones recolectores de basura, cuando los regidores le han informado que a veces sólo trabajan seis.

A raíz de eso Segura le pidió a los diputados liberacionistas que dejaran de defender a Araya y más bien se dediquen a investigar las “mentiras” que dice.