La Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (ARESEP) le dio un jalón de orejas a Acueductos y Alcantarillados (AyA) y le exigió atender las deficiencias en la infraestructura del servicio de agua potable que afectan a 200 mil usuarios.
La Autoridad Reguladora asegura que la presencia de hidrocarburos en el servicio de agua potable es una consecuencia de los riesgos operativos del AyA, que han sido señalados por la entidad en diferentes oportunidades. Ya se ha recomendado:
1. Implementar medidas de mitigación y aseguramiento de la continuidad del servicio ante la materialización de riesgos físicos, ambientales o provocados por terceros.
2. Levantar los procedimientos operativos que permitan homologar las prácticas de potabilización del agua cruda.
3. Dar y garantizar el mantenimiento periódico tanto de la infraestructura física como de la seguridad de los tanques de almacenamiento de agua potable y predios propiedad del AyA, los cuales están expuestos a vandalismo o contaminación del recurso hídrico.
4. Llevar a cabo las inversiones que permitan modernizar las plantas de potabilización, tubería de conducción y distribución del sistema de acueducto, además de incorporar la tecnología en el control, para evitar los reiterados fallos por mala praxis operativa.
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Obligación
El intendente Marco Cordero explicó que “los operadores del servicio público están en la obligación de mantener sus instalaciones, tanques y plantas potabilizadoras con el debido mantenimiento y resguardo de la infraestructura”.
También se le hizo un llamado de atención al Laboratorio Nacional de Aguas y a las autoridades del AyA, por la reacción tan errática a la emergencia presentada con la distribución de agua en los cantones de Moravia, Guadalupe y Tibás.
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De acuerdo con el seguimiento dado a la situación, las acciones del AyA no se dieron a la celeridad requerida, aún cuando la situación ponía en riesgo la salud pública, además de carecer de un protocolo para la atención de estos casos que trasmitan confianza en las acciones a realizar y los mecanismos de mitigación.
De acuerdo con la Ley, el prestador tiene la obligación de garantizar la continuidad de la entrega de agua por medio de cisternas, los cuales deben ofrecer el servicio de manera continua, en horarios consensuados con la población afectada y debidamente comunicados, hasta que se restablezca el servicio ordinario.