Juan Manuel Brenes tuvo este año la responsabilidad de fabricar el nuevo santo sepulcro de la iglesia de Cervantes de Alvarado, el que estrenarán esta Semana Santa.

Según nos contó ese artista de la madera, tardó cerca de mes y medio y lo hizo de cedro.

El nuevo sepulcro en el que descansará la imagen de Jesús mide 2,60 metros de largo, 1,40 metros de ancho y 1,60 metros de alto. Juan no está muy seguro del peso, pero dice que lo tendrán que llevar al menos unas ocho personas.

Juan aprendió desde muy chiquito, junto a su padre, el oficio de la ebanistería; sin embargo, lo relacionado con las imágenes santas y este tipo de obras lo aprendió del arquitecto Andrés Huertas.

Este artista, quien también es árbitro retirado nos dijo que trabajó doce horas de lunes a viernes y solo contó con la colaboración de dos asistentes, pero el diseño y arte los hizo solo.

“Es una copia del que tenían en la iglesia, eso fue lo que me pidieron", explicó el artista.

La base es lo primero que se fabrica. Luego, poco a poco, se fue uniendo y dándole forma a la estructura, que va atornillada.

Y como Juan no descansa, ya empezó con otro encargo, esta vez el altar principal de la parroquia de Cipreses de Oreamuno, en Cartago.

Cuando terminó la estructura en madera, la trasladó a la casa de otro experto en la materia: el escultor y restaurador Bernardo Ramírez Redondo, quien junto a su hija Jéssika Ramírez se encargó de fabricar, en fibra de vidrio, los cuatro angelitos que van en cada una de las esquinas del nuevo sepulcro.

Cada uno de esos ángeles mide 47 centímetros de alto.

Además colocaron los recubrimientos de oro en los relieves de los evangelistas que hay en el “techo” de la urna. Esa labor sí es responsabilidad de Jéssika, quien estudio arte en la Universidad de Costa Rica.

Don Bernardo también fue el responsable de restaurar la imagen del Cristo yacente que irá en la urna.

“Se hizo la restauración total de la imagen y le coloqué los ojos de vidrio”, explicó don Bernardo.

Este lunes el sepulcro debe ser entregado al templo.

Don Bernardo y su hija ya restauraron antes imágenes de la parroquia de Puriscal, la de Cot de Cartago, de la catedral de Alajuela y de la catedral de Cartago.

El talento y la pasión por lo que hacen lo traen en la sangre, pues el abuelo de don Bernardo, Ramón Ramírez fue el responsable de hacer todas las imágenes sacras de la iglesia de San Ignacio de Acosta.

Contáctelos

Si usted desea que alguno de estos artistas le ayude a restaurar una imagen o a hacer una nueva para su casa o donarla a su iglesia puede contactarlos así: a don Juan al correo jmba47@hotmail.com y a don Bernardo y doña Jéssika en el “feis” Arte Sacro Ramírez o al correo fiogarro@yahoo.com