Este jueves 25 las campanas de la catedral de San José sonaron de forma especial, ya que se celebró una ordenación episcopal.
El padre Daniel Blanco Méndez fue ordenado como obispo auxiliar de la Arquidiócesis de San José, puesto que tenia 16 años de estar vacante. El último en ocuparlo fue monseñor Antonio Troyo (ya fallecido).
La misa fue presidida por monseñor José Rafael Quirós, arzobispo de San José, quien en su homilia motivó al nuevo obispo a continuar su servicio cargado de misericordia y amor.
En una catedral repleta de feligreses, sacerdotes, seminaristas, prensa y obispos, monseñor Blanco recibió la imposición de manos por parte de los líderes sacerdotales, mientras que sus papás lloraban de alegría sus papás. Ellos, doña Zita Méndez y don José Blanco estaban en la primera banca para no perder detalles.
“Lloramos de alegría. Jamás imaginé que mi chiquito terminaría siendo obispo. Me acuerdo perfectamente en 1999 cuando nos dijo que se iba a casar con Dios. Yo desde antes lo sentía en el corazón y por eso no me extrañó. Ese día lloramos con él de alegría, pero jamás imaginamos que Dios le tenía tantas bendiciones”, nos comentó doña Zita.
Una vez que finalizó la misa el nuevo obispo comenzó a trabajar, asegurando que su objetivo siempre será servir al pueblo de Dios en todos los rincones del país.
Monseñor Blanco nació el 4 de octubre de 1973 en Coronado. Estudio Filosofía y Teología en el Seminario Mayor. Además es licenciado en derecho canónico de la universidad Gregoriana de Roma. Fue ordenado sacerdote el 8 de diciembre del 2000. Él escogió como su lema de obispo: "misericordia y verdad".