El Hospital Nacional de Niños (HNN) le quedó debiendo a la niñez y le hizo una acción fea a más de 23 mil pequeños a quienes les urgía ser atendidos.
Estos pequeños acudían para algo tan regular como una valoración y hasta para temas serios como cirugías.
Resulta que entre enero del 2023 y agosto del 2024, el departamento de Cirugía del HNN no utilizó 23.459 cupos de consulta externa que tenía disponibles, a pesar de que había 2.531 niños esperando a ser atendidos.
Así quedó demostrado en un informe de la Auditoría Interna de la Caja Costarricense de Seguro Social, de diciembre del 2024, del cual este medio tiene una copia.
Citas perdidas
Nada más para que se hagan una idea de la problemática que es la situación, de esas más de 23 mil citas, 9.280 citas se perdieron entre enero y agosto del 2024.
A lo largo de todo este periodo, los departamentos que más se vieron afectados fueron el de Cirugía General Infantil con 3.471 niños que se quedaron sin ser operados, el departamento de Ortopedia donde se perdieron 1.459 espacios, Urología con 1.459 cupos perdidos y Oftalmología con 1.295 pequeños afectados.
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Completando la lista están los departamentos de Otorrinolaringología, Cirugía Toráxica, Neurocirugía y Cirugía Reconstructiva.
Según este informe, es evidente que el manejo que se realiza dentro de la jefatura del departamento de Cirugía del HNN “no es adecuado para garantizar eficiencia, eficacia y oportunidad en la administración de los recursos institucionales”.
Incluso, llegaron a acusar a este departamento de no involucrarse ni gestionar los procesos de planificación, control y supervisión de las actividades que realizan las demás jefaturas o el personal que se utiliza para las consultas externas.
“Las debilidades expuestas en materia de control interno impactan negativamente el uso y aprovechamiento de los recursos institucionales, en cuanto a la planta física y el recurso humano, en especial por tratarse de profesionales con subespecialidades médicas, en detrimento del derecho constitucional a la salud de los niños”, se lee en el informe.
Sistema tieso
Según nos explicó el doctor Carlos Jiménez, director general del Hospital de Niños, aún no tienen claro el porqué se perdieron estas citas, pero, tiene una idea de por dónde va el asunto.
“Es importante aclarar que estamos analizando, a ver sí, hay problemas entre oferta y demanda. Y si los algoritmos que aportan la información del EDUS son cien por ciento confiables, en relación con lo que produce el hospital”, explicó.
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“Es importante aclarar que existe cierta rigidez en el sistema integrado de asignación de citas y eso hace que se dificulte, por ejemplo, aprovechar algunos cupos de pacientes subsecuentes que no se logran ocupar y, convertirlos en cupos de pacientes nuevos”.
Además, según nos adelantó, han hecho un esfuerzo enorme por revisar todas y cada una de las agendas de los diferentes servicios y departamentos, para que la oferta de citas sea la más apropiada, según la cantidad de especialistas que tienen disponibles, así como la demanda de las citas.
Por último, según el director del centro hospitalario, el sistema de atención de citas no contempla la manera de trabajar del HNN, en especial, las preconsultas.
Resulta que, antes de asignar las consultas, los niños son evaluados por un especialista para definir qué tan prioritaria tiene que ser su atención y si se les deben realizar exámenes o iniciar tratamientos.
“Esta situación, el sistema no la contempla y, por lo tanto, nos castiga. Aún cuando el paciente ha sido valorado, cuando vuelve clasifica como un paciente nuevo”.
“Entonces, no necesariamente es un problema de listas de espera”, justificó.
Momento de cambio
El reporte de la CCSS cerró siendo muy enfático en que el HNN necesita pasar por cambio e incluso le recomendó aplicar una serie de medidas, por los próximos nueve meses, para que puedan funcionar mejor y que no sean los menores de edad los que paguen por los platos rotos.
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Entre las recomendaciones están:
- Fortalecer la gestión integral, enfocándose en áreas como la planificación, organización, dirección, control y seguimiento.
- Definir las responsabilidades y roles de los profesionales en ciencias médicas.
- Ejercer liderazgo participativo en la toma de decisiones.
- Mejorar la programación y distribución de las actividades de los médicos especialistas, que permita ajustes en tiempo real ante posibles cambios imprevistos.
No obstante, a ojos del director de hospital, el tema de los médicos especialistas se las trae porque están cortos de personal.
“Debo ser enfático en que el grupo de anestesistas los tengo reducido a la mitad. Hace diez años teníamos cerca de 24 anestesiólogos, ahora son solo 11 y, para febrero, voy a quedar con nueve por la renuncia de especialistas”.
“Entonces, por más que quiera abrir salas o tener más servicios, es imposible cuando tengo una escasez tan grande”, concluyó.
En La Teja nos pusimos en contacto con el Patronato Nacional de la Infancia para saber si van a intervenir el caso, pero al cierre de edición no hubo respuesta