Las terapias de conversión sexual siempre han sido un tema controversial porque las opiniones están muy divididas entre quienes las ven bien y quienes las quieren prohibir.
En la Asamblea Legislativa hay un proyecto de ley para prohibirlas, fue propuesto hace años por José María Villalta, cuando era diputado del Frente Amplio, pero ha costado un mundo que salga adelante.
En noviembre pasado estuvo a punto de ver la luz y llegar al Plenario Legislativo, pero el diputado Fabricio Alvarado, de Nueva República, logró frenar el avance de la iniciativa.
Este miércoles 21 de febrero la Secretaría de Derechos Humanos de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica (FEUCR), hizo un llamado a la población y a los diputados a darle el apoyo al proyecto de ley que quiere prohibir estas terapias.
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“Lo apoyamos y les llamamos a hacer lo mismo, porque su objetivo principal es ilegalizar las ‘Terapias de Conversión’, paso fundamental para el cumplimiento de los derechos humanos de la comunidad LGBTQIA+ dentro de nuestro país. Se reformará la Ley General de Salud para prohibir las terapias aversivas con la intención de revertir, suprimir o modificar la expresión e identidad de género, características sexuales u orientación sexual de las personas Queer. Las personas víctimas de las ‘terapias’ de conversión sufren consecuencias como pensamientos suicidas, depresión y ansiedad.
“La organización Mundial de la Salud, en el año 1990, eliminó la homosexualidad de la lista de trastornos mentales, dejando sin justificación ética y jurídica a las intervenciones médicas y psicológicas que pretendían ‘‘corregir’ dicha orientación sexual”, dice la UCR.
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En noviembre pasado, cuando Fabricio Alvarado frenó la discusión del proyecto, dijo que el texto necesita cambios.
“En su versión original, este proyecto tiene intenciones muy claras de poner una mordaza a cualquier sector, llámese iglesia, llámese consejería, que esté en contra de la agenda LGBTIQ”, alegó.
Alvarado dijo que no ven necesario prohibir las terapias, pero en todo caso están dispuestos a hacer aportes para que se hagan cambios al proyecto de ley porque así como está no lo ven viable.