Nunca antes había pegado nada, como decimos, ni siquiera la nariz al suelo. Eso hasta el domingo anterior, cuando Randall Artavia Picado recibió la feliz llamada que lo hizo ganador de $200 canjeables en servicios de Ópticas Münkel, tras activar tres códigos de La Teja.
A sus 52 años, este vecino de Hatillo 8 confesó que el certificado por casi 110 mil colones es el primer premio que gana y que le llegó en el momento en que ya le toca revisar de nuevo la vista.
“Hace un año que tengo mis anteojos y quiero usar el premio para hacerme exámenes de la vista otra vez para revisar si los que tengo aún me sirven o si necesito nuevos”, comentó este manudo de pies a cabeza.
Y cuando le comentamos que Ópticas Münkel también tiene un centro médico nos contó que si al final no necesita lentes nuevos o si le sobra un poquito, fijo usará el premio para algún otro servicio, como medicina general u odontología.
Randall comentó además que la sección de La Teja que más le gusta es la de los deportes, más ahora que nadie para a su equipo. “Solo espero que no sea otra vez como la universidad, enseñando todo el año para quedarse en los últimos cuatro partidos”, expresó.
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El regalo le llegó además en un excelente momento, ya que Randall lleva varios meses desempleado y espera que su suerte también mejore con la búsqueda de trabajo en contabilidad, su profesión.
“Por eso estoy muy agradecido primero con Dios por este premio, y por supuesto que con la gente de La Teja y Ópticas Münkel”, dijo.