Hacerle un favor a unos familiares metió en problemas a un sacerdote de apellidos Brenes Villalobos, quien fue detenido como sospechoso de dejar a su sobrinito de 6 años en el desierto de Arizona, Estados Unidos.
La captura de Brenes, quien estaba designado en la diócesis de Tilarán-Liberia, tomó por sorpresa a sus familiares y allegados, quienes dijeron que el cura nunca tuvo mala intención, más bien trató de hacer una buena obra.
Uno de los hermanos del sacerdote, quien no quiso dar su nombre, dijo que la familia está muy afectada por todo lo que está sucediendo; sin embargo, tienen la fe de que todo salga bien para Brenes.
“Estamos con mucho dolor, nunca esperamos que algo así pasara, les pedimos a las personas que comprendan la situación en la que nos encontramos y confiamos en Dios, porque Él es quien sabe toda la verdad”, dijo.
Otro allegado del cura, quien tampoco quiso que su identidad fuera publicada, dijo que se siente muy tranquilo, pues aseguró que quienes conocen al sacerdote saben que se trata de un buen hombre que solo cometió un error por querer ayudar a sus seres queridos.
“Hay que esperar a ver qué pasa, tenemos la fe de que todo va a salir bien porque él no ha cometido ningún delito, hizo una acción de buen corazón. Me imagino que él ahora va a tener que declarar y contar su versión, entonces vamos a esperar a ver si le ponen alguna medida cautelar”, dijo el hombre.
Ambas personas indicaron sentirse mal por como muchos han tratado a Brenes, especialmente en redes sociales, señalándolo como un criminal o una persona sin corazón, cuando realmente no saben la historia que existe detrás de todo este caso, el cual inició en junio del 2018.
Niño está con la mamá
El Ministerio de Relaciones Exteriores informó vía correo electrónico, que el año pasado el menor fue trasladado a Nueva York para que estuviera al lado de su mamá.
"Hasta donde tenemos conocimiento, en su momento y hasta que se reunificara el niño con su madre, nuestros consulados en Arizona, Los Ángeles y finalmente Nueva York le dieron seguimiento y acompañamiento al caso.
“Una vez que se constatara que el menor de edad se encontraba en buen estado de salud y fuera entregado a la custodia de la madre, la decisión de mantenerse en contacto o solicitar colaboración con nuestros consulados en Estados Unidos es voluntad de la madre”, indicó la oficina de prensa de la institución.
Al consultarle sobre la situación actual del menor y sus familiares, se indicó que recientemente no han tenido comunicaciones con los familiares del niño y por lo tanto, no disponen de información actual.
Maestro de ceremonias
El sacerdote aprehendido la mañana del miércoles ejercía su labor pastoral de manera normal en la iglesia de San Jerónimo de Sardinal de Carrillo.
Feligreses de dicha parroquia indicaron que el padre Brenes ha sido maestro de ceremonias del obispo de Tilarán, monseñor Manuel Eugenio Salazar, en actividades relevantes, pues es un gran conocedor de la liturgia (todos los pasos que implica la celebración de la misa).
La Teja intentó localizar este miércoles a monseñor; sin embargo, no respondió su celular ni los mensajes ni correos enviados.
Solamente escribió en la mañana en su página de Facebook “¿Por qué te acongojas, alma mía, por qué te me turbas? Espera en Dios que volverás a alabarlo“ (Salmo 42, 6).
El sacerdote Brenes es guanacasteco y ha brindado servicio en las parroquias San Antonio de Padua Playa Hermosa, Carrillo y San Isidro Labrador en Nandayure, entre otras.
El 10 de enero anterior, el padre Brenes se despidió en Facebook de los feligreses de la parroquia de Nandayure con un texto acompañado de una foto donde sale con monseñor Salazar.
“Despedida. Gracias a Dios y a ustedes pueblo nandayureño por permitirme, trabajar, reír y soñar junto a ustedes en el deseo de un templo parroquial hermoso, digno de Dios. Gracias por la paciencia que me tuvieron y por colaborar en tantas actividades. Les pido perdón por cualquier actitud no evangélica y les pido perdón por no poder dejarlos celebrando en el templo (que era mi deseo). Gracias y bendiciones a todos. Les llevo en mi corazón y en mis oraciones”.