Hace seis años, Isaac Amador y su esposa, María de Los Ángeles González, no sabían nada del cáñamo, pero ahora que han visto las maravillas que le hacen a su hijo, Mateo, de casi seis añitos, pueden contar los beneficios medicinales que tiene.

Mateo nació con parálisis cerebral, epilepsia y muchos problemas respiratorios, por eso, cuando era un bebé, sus papás tenían que salir en carrera al hospital en la madrugada para que le pusieran oxígeno.

“Debíamos ir al hospital una o dos veces al mes con él y le ponían hasta doce mascarillas de salbutamol y de dexametasona al día, hasta que una señora me dijo que le diera raíz de cáñamo. Al principio no le creía, pero insistió y probamos”, contó don Isaac.

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Antes de eso, el papá averiguó si no el cáñamo era peligroso o drogaría a su pequeño y al comprobar que no había riesgo, le dio un té. Fue tan bueno el resultado que pasó hasta un año y no se enfermó.

“En los últimos cinco años, solamente se nos ha enfermado tres veces y como si no fuera con él. Lo mejor fue que nunca más hubo que volver a nebulizarlo y lo declararon libre de asma, ha sido una experiencia genial para el niño”, contó el padre.

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Don Isaac siguió investigando y dio con el cáñamo medicinal, cuyo aceite es alto en CBD (compuesto natural del cannabis) y le controló las convulsiones de epilepsia.

“La neuróloga que lo ve nos dio el visto bueno para probar y se lo empezamos a dar, porque los efectos secundarios de los medicamentos para la epilepsia son muy fuertes y debe hacerse exámenes de hígado y riñón cada seis meses para ver cómo están ambos órganos. Desde entonces, solo ha tenido dos convulsiones y al inicio, mientras descubríamos la dosis adecuada para él. Así lo hemos liberado del noventa y ocho por ciento de los medicamentos”, contó feliz don Isaac.

Prohibición

Eso sí, al papá de Mateo le ha tocado jugársela como un vikingo para conseguir cáñamo, pues en nuestro país es prohibido producirlo, cosecharlo y distribuirlo, tanto en la Ley General de Salud, como en la de Estupefacientes, por ser un primo cercano de la marihuana.

“Tenemos dos plantas de una cepa creada en laboratorio y tratada científicamente para que tenga muchísimo CBD (21%) y menos de 1% de THC (lo que genera el efecto de la marihuana), como no tiene nada de sicoactiva, solo el poder medicinal, si alguien se la fumara, no sentiría nada”, aclaró don Isaac.

Cuando se mueren las maticas que tienen y deben mandar a traer más, es cuando se les complica la cosa, por eso están sacando los hijos de la matas antes de que florezcan y se mueran, para tener la disponibilidad cuando la necesitan.

Es por esto que se crearon varios proyectos de ley que buscan modificar y flexibilizar su producción en el país, la más reciente es la de la diputada independiente Zoila Rosa Volio, quien vio con agrado el anuncio del presidente Carlos Alvarado, el pasado 4 de mayo, de que el Gobierno impulsaría el cáñamo para reactivar la economía del país.

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La iniciativa de Volio incluye el apartado del cannabis para fines medicinales.

Desde tiempo de Colón

El cáñamo y su uso no es nuevo, para que se haga una idea, se dice que las carabelas en las que Cristobal Colón descubrió América eran hechas de las fibras de esta planta, muy utilizada en la industria textil en aquel entonces.

“La ropa se hacía de cáñamo, pero cuando se compró la Dupont (fábrica de ropa), los grandes intereses americanos lo prohibieron para obligarnos a usar el poliéster”, explicó Volio.

Como detalles curiosos, se dice que los primeros jeans de la marca Levi’s eran hechos con fibras de esta planta y que el papel de cáñamo permitió a los chinos la difusión de información en tiempos muy antiguos.

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Cáñamo contra marihuana

Ambas pertenecen a la misma familia del cannabis sativa, pero su uso y composición son lo que las diferencian.

• El cáñamo se cultiva para obtener materia prima como: semillas, aceite, fibra, celulosa, entre otros. La marihuana para fumarla.
• El cáñamo tiene altos niveles de CBD (de donde se extrae el aceite con efectos relajantes y antioxidantes) y bajos niveles de THC, la parte del cannabidol que produce el efecto psicotrópico. En la marihuana los niveles de estos componentes son a la inversa.
• La planta del cáñamo es más alta, puede medir hasta 5 metros, tiene tallos más espesos, menos huecos y no tiene muchas ramas, no florea tanto como la marihuana.