Mariela Cruz, embajadora de Costa Rica en la India entre marzo del 2017 y octubre del 2018, y su exesposo, un triatlonista de apellido Jiménez que el año pasado fue campeón nacional en la categoría máster de esa disciplina, están enfrentados por la custodia de sus tres hijos.
Cruz tiene 52 años y Jiménez 37 y, según ella, el hombre le quitó a sus tres pequeños mientras ejercía su función de diplomática.
La mujer cuenta que en marzo del 2016, la Cancillería le ofreció el puesto de embajadora, pero fue hasta un año después cuando lo asumió, pues debía prepararse en temas como el idioma y en los trabajos que pensaba llevar a cabo en esa nación.
“Durante esa preparación me doy cuenta cómo es el país, me entero que la ciudad donde iba a estar, que es Nueva Delhi, es de las más contaminadas, entonces decidí que no iba a llevar a mis hijos conmigo, en ese momento tenían 10, 8 y 7 años”, comentó.
“Además, las temperaturas cambian mucho, durante unos meses llegan hasta los 50 grados y en otros baja a los cero grados, eran condiciones inhumanas para mis hijos”, agregó.
Conociendo esto, Mariela asegura que llegó a un acuerdo con su ex, este consistía en que el padre se dejaría a los pequeños en Costa Rica por el tiempo que ella estuviera en la India, una vez terminado su periodo como diplomática, regresaba al país y seguía viviendo con sus retoños.
Mariela dijo que durante ese tiempo se comunicaba con sus hijos constantemente por videollamadas y que nunca notó alguna conducta extraña en Jiménez que le hiciera creer que se los quería quitar.
Dice que su calvario inició en octubre del 2018 cuando terminó su servicio en suelo asiático, ya que pocos días después de regresar al país recibió una notificación de un juez, que le ordenaba que los pequeños debían estar con el padre.
“Mientras estuve como embajadora, fui a Costa Rica cuatro veces, la última fue en julio y él me dijo que los chiquitos tenían que vivir con él, yo le dije que eso lo entendía, pero que habíamos llegado a un acuerdo. Lo que no sabía era que desde marzo del 2018 él había empezado un proceso de cambio de custodia y a mí nunca se me notificó”, comentó.
Según cuenta, fue en noviembre del 2018 cuando vio a sus hijos por última vez.
“Me deprimí bastante, no podía dormir, tuve ataques de ansiedad y de pánico, pesadillas, me pasaron muchas cosas. Le dije a mis papás que no podía seguir así, entonces me vine para la India donde ahora estoy viviendo, pero sin poder ver a mis hijos”, contó.
“No cumple lo que dijo el juez”
Wálter Brenes, abogado del deportista, dijo que las declaraciones de la exembajadora son falsas.
“Ella no cumple lo que dijo el juez, ha incumplido con el régimen de visitas que son los días miércoles. No le gusta, no le parece, tilda la resolución de ilegal. Es decir, una exdiplomática, le está faltando el respeto a un juez de la República y como no le parece la resolución no ha querido ver a sus hijos”, comentó.
Sobre el acuerdo al que supuestamente llegaron Mariela y Jiménez para que ella recupera a sus hijos tras cumplir el servicio diplomático, Brenes desmintió que hubiera uno.
“Tenemos a un padre que ha sido responsable, que ha puesto sus recursos y su vida para dedicarse a sus tres niños, este no es un caso más donde se habla de un padre irresponsable, ha sido un papá ejemplar a quien sus hijos quieren mucho. Incluso, el juez entrevistó a los niños y son ellos los que dicen que quieren estar con su padre”, destacó el defensor.
De acuerdo con el Juzgado de Familia de Alajuela, la causa se mantiene abierta y, según dijo la madre, interpuso una apelación para que le devuelvan la custodia.
La exdiplomática asegura que ella ha cubierto la mitad de los gastos de los niños, que ronda el millón de colones; sin embargo, el abogado dijo que esto también es falso.
“El papá hizo lo correcto”
El abogado de familia Belisario Solano considera que el exesposo de Mariela Cruz actuó bien al pedir la custodia de sus tres hijos mientras ella ejercía su función de diplomática.
“El papá hizo lo correcto, lo que en este caso ocurrió fue que el juez probablemente visibilizó que hacía falta la madre por un tema de trabajo y decidió darle este derecho al papá”, comentó Solano.
El experto aclaró que esta decisión podría ser temporal, es decir, que Cruz puede solicitar al juez que sus hijos estén nuevamente con ella. Eso sí, debe justificar por qué no ejerció durante cierto tiempo su rol materno.
“Hay un detalle y es que si los niños dicen que quieren estar con el papá se debe respetar eso”, añadió.
Solano explicó que al padre que no tenga la custodia se le tiene que dar un régimen de visitas por semana para que vea a sus hijos y que dependiendo del caso podría ser de uno o más días.
“Este rol de visitas se da para tratar de reconstruir el lazo afectivo entre madre e hijos, para que los niños no sean los afectados y que de esta forma se vuelva a crear confianza entre madre e hijos”, añadió.
El abogado destacó que la sociedad costarricense ha cambiado en los últimos años, pues antes se creía que la guarda crianza de los hijos era exclusiva de las madres.
“Se ha visto y comprobado que los papás también tienen la capacidad de ejercer el rol paterno de una excelente manera”, destacó.
Para este tipo de problemas, Solano aconsejó a los padres hablar antes de llegar a una instancia judicial que podría afectar a los menores.