Varios estudiantes de noveno del colegio de Gravilias, en Desamparados, pasaron del llanto y la decepción a vivir momentos felices e inolvidables.
Hace unos días en La Teja sacamos una nota porque los muchachos de noveno de ese centro educativo que habían ganado la primera convocatoria, no iban a poder participar de la ceremonia de entrega de certificados con sus compañeros porque no iba a dar tiempo de poner las firmas.
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Ellos se enteraron de eso cuando estaban listos para empezar el ensayo de la ceremonia de entrega de certificados, lo que los llenó de tristeza y decepción, algunos hasta se pusieron a llorar porque aunque ya había pasado el año, no iban a poder celebrar como se debía.
Los papás de los afectados se enojaron mucho, no entendían porqué el colegio no se les avisó a ellos y a los muchachos con tiempo para que no fueran en vano al ensayo y no pasaran ese mal rato.
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Ivette Villalobos, directora del colegio de Gravilias, dijo que el atraso se dio porque no le había llegado el libro de actas con las notas de los estudiantes que fueron a convocatoria y se comprometió a hacer todo lo posible para resolver el tema, pero sí dejó en claro que las firmas no dependían de ella, sino del supervisor de Educación.
El MEP, por su parte, informó que iban a hablar con los encargados de hacer los trámites para que hicieran un esfuerzo extra y todo estuviera listo para este martes, día en que estaba programada la ceremonia, y así fue.
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El viernes pasado se les informó a los padres de familia que en solo unas horas el supervisor firmó los certificados y todos respiraron aliviados.
La ceremonia se llevó a cabo este martes a las 7 de la mañana en el parque La Libertad. Todos los muchachos se mostraron felices, y ni qué decir sus papás, que desbordaban orgullo y alegría.
En medio de cámaras, luces, aplausos y hasta gritos, cada estudiante fue pasando a la tarima principal a recoger el certificado. Todos están contentos y con una gran ilusión porque ya solo les falta dos años para obtener su título de secundaria.