Luego del enredo que se generó este martes entre la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) y la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) sobre quién tenía la culpa de que suban los combustibles, la entidad encargada de aprobar las tarifas aclara que está tramitando dos propuestas a la vez.
El primer ajuste sería el del aumento de ¢5 en el litro de la gasolina súper que dejaría el precio total en ¢851; en el caso de la regular, subirá ¢4 para dejar el litro en ¢811 y el diésel incrementa ¢2 su precio para quedar en ¢867 esta quería listo en los próximos días.
Pero igualmente, la Aresep continúa con el análisis de las tarifas anunciadas por Recope la semana anterior y en este caso, sí volvería a bajar el precio de la gasolina súper, el diésel y hasta el del gas LP, solo la gasolina regular volvería a aumentar.
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La propuesta en este caso, que debe someterse a consulta pública, es de ¢55 menos en el litro de la gasolina súper, lo que permitiría que el litro quede en ¢796; la regular subirá ¢30, dejando el litro en ¢841 y generando un hecho histórico cuando por primera vez, el precio de la regular sería más alto que el de la súper, con una diferencia de ¢45 por litro.
Mientras que el diésel bajaría ¢42 y el litro se establecería en ¢825 el litro y para los hogares que cocinan con gas LP, también hay buenas noticias porque el cilindro de 25 libras bajará ¢917 y el precio final de este envase quedará en ¢8.045.
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Este ajuste sería el correspondiente al mes de octubre, pero entraría en vigencia hasta mediados de noviembre aproximadamente.