Sin decir nombres, Rosario Murillo, esposa del dictador Daniel Ortega, la agarró contra Costa Rica.
Al hablar por los medios de comunicación oficialistas este martes, Murillo dijo: "Esta situación que está planteada en Centroamérica, donde miles de familias dependen del trabajo honrado de los transportistas centroamericanos y donde se impondrá, estamos seguros, el bien. Es decir, el derecho que tienen las familias de todos los países de Centroamérica a vivir con trabajo, porque nadie está encima de nadie”.
Y siguió: “Vivimos en Centroamérica, no vivimos en Europa. No hay un país europeo y los demás países centroamericanos. Países que se dicen europeos donde se desprecia la identidad y la idiosincrasia de los pueblos originarios. Nos dicen indios...”.
Irresponsabilidad
El gobierno de Ortega ha recibido críticas por resistirse a imponer medidas para controlar los contagios durante más de dos meses desde la aparición del primer caso.
El gobierno ha manejado de manera confusa y restringida la información sobre la pandemia en medio de denuncias que aseguran que muchos supuestos decesos por COVID-19 se diagnostican como “neumonía atípica” o “paro respiratorio”, aunque se ordena su sepultura inmediata siguiendo los protocolos dictados para la actual pandemia.
No se ha llamado a cuarentena y más bien se han promovido veladas de boxeo, desfiles y hace poco terminó el campeonato de fútbol, al que llegaba gente.