El análisis semanal de la Universidad Hispanoamericana (UH) reflejó que la tasa de contagio de la covid-19 en Costa Rica llegó a los niveles más bajos desde el pasado 11 de febrero.
Según el reporte, la también conocida como tasa R, que indica cuántas personas en promedio se infectaría por un portador del coronavirus causante de covid-19, se ubica este viernes en 0,83.
Sin embargo, esta semana el viceministro de Salud, Pedro González, aseguró que nos encontramos ante la llamada tercera ola de contagios, lo que pareciera ser contradictorio, por eso La Teja le pidió al epidemiólogo de la UH, Ronald Evans que nos explicara.
“Esto puede ser un espejismo, esto no puede dar origen a un optimismo radiante y decir que ya estamos bajando el peligro y que no va a haber una tercera ola”, dijo Evans.
El epidemiólogo amplió en que habrá que esperar los resultados de esta y las próximas semanas para ver si estamos en realidad ante la presencia de una tercera ola.
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“Todas las condiciones externas indican que así va a ser. Vemos lo que pasa en América Latina especialmente en Brasil con tantas muertes, Chile y Argentina y que en todo el continente ya llegaron las variantes de preocupación como la brasileña (P1) que la OPS dijo que está circulando en 20 países de aquí y Costa Rica no es la excepción”, agregó el experto.
Mal comportamiento
Lamentablemente en Costa Rica tiene todos los tiquetes comprados: presencia de otras variantes más contagiosas y comportamiento de muchos en Semana Santa irrespetando las medidas de distanciamiento y uso de mascarilla, por lo que muy probablemente viviremos un recrudecimiento de casos.
“No hablemos de una ola porque nunca hemos alcanzado aplanar completamente la curva como para decir que viene una nueva ola, sino un recrudecimiento de la ola que viene desde julio o agosto del 2020 y que no nos ha abandonado, porque nunca hemos tenido semanas por debajo de 100 casos”, continuó explicando el doctor Evans.
Aclara que no hay una contradicción entre el informe de la universidad y las autoridades, pues este dice que durante la Semana Mayor disminuyó el número promedio de casos diarios y el índice de reproducción, abajo de uno.
Una explicación a la baja en los números puede ser la dada por el presidente de la Comisión Nacional de Emergencias, Alexander Solís el martes en conferencia de prensa, donde indicó que muchas personas que pudieron haber estado sintiendo algún síntoma, evitaron acercarse a hacerse la prueba por aquello de que si salían contagiados les giraran la orden sanitaria de aislamiento y se pasearan en sus planes de vacacionar, lo cual calificó de comportamiento irresponsable.
“Mucha gente que estaba en el río o la playa aunque se sintiera un poco mal, no pensaba en ir al Ebáis a que lo diagnosticaran positivo”, puntualizó el epidemiólogo.
La suposición de Evans no estaría tan lejos de la realidad, pues este viernes se reportaron 2.698 casos nuevos en los últimos tres días, con 907 el miércoles, 877 el jueves y 914 este viernes.
Además se reportaron 18 muertes entre los tres días.
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