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Cada vez son más los hogares en los que a la mascota se le quiere y trata como un miembro más de la familia, por eso en la empresa Subaru se pusieron una flor en el ojal y le dieron un beneficio a los que tengan un peludito en casa o quieran adoptar uno.
La medida empezó a regir a inicios de octubre, cuando se le avisó a los colaboradores que darían un día libre a aquellos que quieran adoptar un perro o un gato (para que tengan tiempo de ir por el peludito y conocerse) o a los que lamentablemente sufran la pérdida de su amigo fiel.
"Nos hemos caracterizado en el mundo por ser una marca afín con las mascotas y estas se han convertido en parte de la familia, en entes terapéuticos para niños, en compañía para señores mayores, personas solas y se han vuelto una parte muy importante del vivir de la sociedad.
"Respetamos mucho la parte humana y les estamos dando un incentivo a los empleados de un día libre pagado para que se encarguen de enterrar a sus mascotas y llorarlas el día que partan. O, por el contrario, un día para adaptarse a ellos y conocerse, luego de llegar del albergue donde lo adoptó", explicó Kristian Federspiel, director comercial de Autos Subaru
También le dan chance a los empleados para que saquen el tiempo y lleven a los peluditos al veterinario si están enfermos.
Estas medidas convierten a la empresa automotriz en la primera en chinear a sus 26 empleados con semejante detallazo.
“Queremos apoyar la protección de animales domésticos para evitar que deambulen por las calles o estén en albergues, por lo que le daremos un día libre pagado a cualquiera de nuestros colaboradores que acoja a alguno”, explicó el director comercial.
"Es una tranquilidad"
Rocío Delgado trabaja en Subaru y por eso es una de las beneficiadas con esta iniciativa, la cual la tiene muy contenta.
Ella es la mamita de Chelo, un zaguatico que hace seis años llegó a la puerta de su casa y lo adoptaron. Además, es la abuela de Dolly, la perrita consentida de su hija, a la que adoptaron de un albergue.
"Es una tranquilidad saber que si se me enferma Chelo o Dolly puedo llevarlos al veterinario a que los revisen y regresarlos a la casa con tiempo, para luego irme al trabajo, sin la preocupación de que se me hace tarde para entrar o que tengo que ver qué excusa le invento al jefe para justificar mi retraso. Es como cuando tenemos una cita en el seguro, se sale de eso y luego se incorpora al trabajo", explicó Delgado.
Doña Rocío cree que cualquiera que tenga un animalito enfermo en casa se va preocupado al trabajo, por lo que no estará 100% concentrado, ni se entregará como otras veces a sus labores. Por ello invitó a otras empresas a copiar la iniciativa, lo cual ayudaría a que más personas se apunten a adoptar animalitos abandonados.
Predica con el ejemplo
Don Kristian, el director comercial de Subaru, predica a sus empleados con el ejemplo, ya que él tiene tres perritos adoptados, a los que les dedica todo su amor y cuidado.
Se trata de Louie, un yorkie criollo de tres años; Ambar, una labradora de la misma edad y la más viejita de todos es Yaka, una zaguatita recogida de la calle hace cinco años, que ya estaba entradita en años, de ahí que ya hasta le cuesta caminar.
El empresario aclaró que no están igualando la condición de los animales a la de las personas, solo están promoviendo que los colaboradores puedan hacerse cargo de sus mascotas porque son parte importante en sus hogares. Además, buscan despertar consciencia social y fomentar la adopción de animales.
"Es obvio que si los empleados tienen un niño enfermo se le da libre para que se haga cargo de él, ahora también lo aplicamos para los dueños de mascotas, que ven a estos como sus 'chiquitos', guardando las distancias correspondientes", aseguró Federspiel.
Para los mal pensados que creerían que más de uno adoptaría un animal solo para tener un día libre, el director explicó que podría salir más caro el caldo que los huevos porque después se tendrán que hacer cargo del animalito, además, asegura que conoce la calidad moral de sus empleados y, como la mayoría tienen años de trabajar para la empresa, tienen mucha confianza y saben que no necesitan recurrir a esas tramas.
Por eso no llegarán a pedirles facturas ni ningún comprobante para ver si dicen la verdad. La medida solo aplica para animales domésticos como perros, gatos, cuilos, hámster, etc.
Quedan fuera peces, granjas de hormigas o gallinas, entre muchos otros.
