La Sala Constitucional se trajo abajo beneficios presentes en siete artículos de la convención colectiva de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) y anuló por completo otros cuatro artículos.
La resolución es el resultado de dos acciones de inconstitucionalidad presentadas por el libertario Otto Guevara (quien era diputado cuando presentó la gestión) y Enrique Egloff, representante de la Cámara de Industrias de Costa Rica en el 2016.
La acción se votó el miércoles anterior y según el fallo, los beneficios violentan los principios de igualdad y austeridad en el gasto de los recursos públicos.
Adiós a los excesos
Uno de los principales cambios aplica para el inciso D del artículo 142, en el cual la Sala establece que el tope de cesantía será de 12 años. Anteriormente, este tope era de 20 años.
Además, elimina del artículo 32 el beneficio de licencia con goce de salario cuando un hijo de los trabajadores se casa. Anteriormente, se le daban dos días libres hábiles.
Otro cambio aplica para el artículo 36, que se refiere al pago de incapacidades por enfermedad o accidente laboral.
La Sala eliminó el apartado que indica que Recope pagará un subsidio del 100% del salario “al trabajador que sufra incapacidad causada por accidente de tránsito, que no constituya riesgo profesional”.
También se elimina la posibilidad de que los familiares de los trabajadores puedan acceder a los servicios de odontología, según lo estipula el artículo 86 y se elimina el beneficio para que los hijos de los empleados accedan a becas de estudio.
“Hay que celebrarlo”
Mauricio Sánchez, fundador de la iniciativa “Ya no más Recope”, dijo que la eliminación de esos artículos significarán un respiro para el bolsillo de los costarricenses.
“Esto es fabuloso, hay que celebrarlo por todo lo alto porque no es posible que una institución como Recope tenga beneficios ridículos”, dijo.
Sánchez fue más allá y dijo que la convención colectiva de esta institución, que brinda privilegios a todos los funcionarios, debería desaparecer.
“Soy del criterio que el pueblo no debe pagar esos abusos, es más, ningún trabajador público debería percibir más que su salario por el tiempo que trabaja”, agregó.
Para este indignado costarricense, lo que le hace falta a la Refinadora es competencia para que mejoren el servicio, tal como ha ocurrido con otras instituciones públicas.
“Recope es un despilfarro, ellos mantienen la misma planilla y la misma forma de trabajar, prácticamente son un tubo abierto desperdiciando recursos, ya no se puede seguir tirando plata así y menos a como está el país”, añadió.