Rolando Castillo, coordinador del programa de Ingeniería Estructural del Laboratorio Nacional de Medidas y Modelos Estructurales de la Universidad de Costa Rica (Lanamme-UCR), es a quien le toca ver todo el tema de puentes en el país y explica que el puente sobre el río Reventado, en la ruta nacional 219, no es un puente tipo bailey sino tipo cercha y que está lleno de corrosión por debajo, según confirmaron ellos hace un año.
Explica el especialista que lo construyeron por ahí de 1974, en la administración de Daniel Oduber Quirós (1974-1978) y que la diferencia con un bailey es que el puente tipo cercha se construye para que resista con el tiempo y el bailey es una solución temporal.
“A nosotros (en Lanamme-UCR) nos tomó por sorpresa que se cerrara, por eso fuimos a visitarlo para ver si el puente tenía algo diferente a lo que ya habíamos detectado en el 2021. Lo que observamos fue la misma condición de hace un año.
“Es decir, tenemos un puente que en la parte superior de la cercha hay elementos (partes) que se han desprendido debido al golpe que le han dado vehículos. Estos golpes se dan porque a la entrada del puente tiene una altura libre de 4,6 metros de altura y los vehículos que circulan hoy en día por las carreteras tienen alturas mucho mayores”, explica el ingeniero.
Aclara el especialista que la enseñanza que deja el puente sobre el río Reventado es que el país debe cambiar la altura en muchos puentes tipo cercha -como ese- para que los carros no los golpeen. La altura de 4,6 metros es muy baja para los vehículos autorizados a circular actualmente.
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De hecho, explica Castillo, eso es lo que está haciendo el ministerio de Obras Públicas y Transportes (Mopt), poner una viga de lado a lado más alta para evitar golpes.
“En cuanto a los otros daños que detectamos hace un año, está la loza (el piso) que está tremendamente agrietada y es de esperar que así sea por que es un puente que ha estado al servicio por mucho tiempo. Además, presenta todos los problemas que puede tener un puente que no ha sido atendido a lo largo de los años, como lo es la corrosión del acero.
“Si nos metemos debajo del puente veremos el gran problema de este país, un país en el cual todavía no tenemos una cultura de velar por nuestros puentes. Son un activo al cual hay que darle mantenimiento y este puente, al cual no se le ha dado mantenimiento, presenta problemas de corrosión debajo de las juntas de expansión. Este es un mal que ya hemos identificado en muchos puentes del país”, explica Castillo.
La advertencia de Lanamme-UCR es para que en las autoridades del país se de un cambio de mentalidad y se apueste por la conservación de la infraestructura, de los puentes en este caso. Se le debe dar mantenimiento de forma rutinaria.
El puente sobre el río Reventado es solo un ejemplo de la realidad de muchos de los puentes del país. Se debe dar un paso más allá, identificar los puentes que urgen de una intervención y que son importantes por estar en carreteras importantes del país.
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La intervención del puente brumoso tuvo que haberse dado hace años, explica el ingeniero. Un puente ocupa mantenimiento planificado, desde que se construye y a lo largo del tiempo, asegura el ingeniero de Lanamme-UCR.