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El asma no se cura, pero se puede controlar con las medidas adecuadas

La Caja informa que una persona con asma puede hacer una vida completamente normal, pero debe ser muy disciplinado

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La gran mayoría de personas que desarrollan el asma son pequeñitos menores de doce años. Hablamos de una enfermedad que no se cura, pero que se puede tener bien controladita.

La Caja Costarricense de Seguro Social (Caja), asegura que una persona con asma puede lograr una vida completamente normal si cumple con las indicaciones médicas. Con esta sencilla afirmación se refieren los especialistas en neumología al hablar de esta enfermedad.

El inicio de los aguacero, generalmente, dispara el asma en muchos niños y adultos. (Cortesía )

Hablamos del asma porque justo por estos días está comenzando el invierno, que es cuando se disparan los casos.

De acuerdo con el doctor Arturo Solís Moya, especialista en pediatría y neumología del Hospital Nacional de Niños, el asma es una enfermedad respiratoria que afecta las vías aéreas.

“Esto significa que la tubería que conduce el aire del ambiente hacia los pulmones está continuamente inflamada, se va cerrando con el paso del tiempo y ante ciertos estímulos, de tal forma que produce en el paciente síntomas tales como dificultad respiratoria, tos, sibilancias (ruidos) y apretazón de pecho.

“Para el especialista, el asma se puede controlar con un adecuado tratamiento, con seguimiento médico de manera periódica y evitando aquellos factores que pueden generar la enfermedad o que han sido reconocidos como factores que disparan los síntomas y las crisis, tanto en niños como en adultos”, explica el doctor Solís.

De acuerdo con el doc, los principales desencadenantes de las crisis asmáticas tienen que ver con infecciones respiratorias, como las gripes o la influenza, así como infecciones por otros virus.

También el factor ambiental es muy importante, como los cambios de temperatura, el ingreso de la estación lluviosa, la contaminación ambiental, el fumado de primera, segunda y tercera mano, olores fuertes como el diésel, la gasolina, el barniz o la cera.

Además, el polvo, los ácaros y los llamados aeroalergenos; es decir, sustancias que se difunden por medio del aire y que van a provocar dentro de esa tubería respiratoria más inflamación, más cierre y por lo tanto le provocan al paciente una crisis de asma.

Eduardo Vega

Eduardo Vega

Periodista desde 1994. Bachiller en Análisis de Sistemas de la Universidad Federada y egresado del posgrado en Comunicación de la UCR. Periodista del Año de La Teja en el 2017. Cubrió la Copa del Mundo Sub-20 de la FIFA en el 2001 en Argentina; la Copa del Mundo Mayor de la FIFA del 2010 en Sudáfrica; Copa de Oro en el 2007.

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