EscucharEs típico que muchos digan que qué pereza ir a trabajar un lunes después de haber descansado el fin de semana, pero es más porque les cuesta arrancar luego de unos días libres.
Sin embargo, hay personas para las que ir al brete es un verdadero martirio porque los compañeros o el jefe le hacen la vida de cuadritos todos los días, pero siguen soportando porque necesitan el salario.
Los chismes, pleitos, acoso, gritos, malos tratos, jefes que no escuchan a sus trabajadores o hasta festejan las habladurías son los factores que alimentan un ambiente laboral negativo.
Además, si el empleado no sabe lidiar con los problemas personales o familiares y pasa malhumorado, provoca un ambiente hostil con sus demás compañeros.
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Los grupitos que dejan de lado a los que no se apuntan al chisme o la chota o los jefes con empleados consentidos por encima de los demás, también entran en este mal ambiente laboral.
¿Cómo puede hacer para sobrellevar el día a día en un ambiente así? El director de Psicología de la Universidad Fidélitas, Álvaro Solano, le da estos bolados:
- Use la inteligencia emocional para compartir con sus compañeros
- Sea respetuoso y exija que lo respeten
- Entienda que todos somos diferentes y sea tolerante
- No se apunte al chisme y huya de conversaciones tóxicas entre compañeros
- Evite llevar los problemas de la casa al trabajo, no es bueno contarlo todo
- Júntese con personas positivas
- Ponga distancias y límites con las personas negativas
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- Identifique y sopese qué tanto esta impactando su trabajo, su salud y calidad de vida esta situación para tomar acciones correctivas
- Comuníquele a recursos humanos lo que pasa para que traten de mejorar el ambiente
- Busque diferentes formas de entretenimiento para compensar y alimentar el espíritu.
