De acuerdo con el portal de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, a medida que el cuerpo empieza a envejecer, el cerebro y el sistema nervioso, que se encargan del sistema central del cuerpo, tienden a padecer cambios naturales, como la pérdida de tejido cerebral o la reducción de reflejos y sensibilidad.
En ese sentido, el desgaste del cerebro y el cuerpo se pueden manifestar de diferentes maneras, como por ejemplo la pérdida de la memoria y la capacidad cognitiva. Sin embargo, hay alimentos que al ser administrados de forma balanceada pueden tener un efecto positivo en el estado de ánimo y el deterioro cerebral de las personas.
Según la psiquiatra nutricional Uma Naidoo, de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, la salud mental y nuestra alimentación están vinculadas, por lo que dependiendo del tipo de dieta, esta puede generar consecuencias en el organismo.
De hecho, Uma considera que “la dieta puede tener un impacto profundo en las afecciones como el TDAH, la depresión, la ansiedad, los trastornos del sueño, el TOC y la demencia”. Esto llevó a la psiquiatra a publicar un libro en 2023, llamado ‘Lo que la comida le hace a tu cuerpo’, en el que habla y ofrece algunas técnicas para optimizar la salud mental a través de la comida.
Es así como algunos expertos de Harvard recomiendan consumir, al menos una vez por día, una porción de semillas de girasol, ya que estas tienen una cantidad idónea de proteínas que les permite ayudar a reconstruir los tejos y así aumentar la masa muscular.
Además de ser un snack sencillo y nutritivo para las personas, este aporta 20 por ciento de la vitamina B y ayuda a regular la actividad del sistema nervioso. Por otro lado, esta semilla contiene grasas insaturadas que ayudan a gestionar los problemas de piel y cabello.
De la misma forma, las semillas de girasol cuentan con un grupo de antioxidantes que ayudan a combatir enfermedades como el cáncer. Al ser ricas en fibra, el tránsito intestinal mejora y previene el estreñimiento.