De las 18 propuestas que presentó el Gobierno para buscar que el Fondo Monetario Internacional le preste plata, el 80% son impuestos y el 20% son recortes al gasto público, según explicaron los expertos.
Y se trata de impuestos que golpean fuerte a la clase trabajadora y empresarial. Desde el que le quieren meter a todas las transacciones bancarias (como sacar plata de un cajero o pasarlo por SINPE) hasta triplicar el municipal de casas y lotes, meterle un 25% de impuesto a los premios de la lotería y aumentar el impuesto a la renta a partir de los salarios de 840 mil.
“Ya de entrada te das cuenta que hay un desbalance totalmente injusto en la parte impositiva. Y además, el tema de reducción de gasto tampoco se puede ejecutar de la noche a la mañana, en cambio los impuestos sí. Lo que le mete más picante la coctel molotov”, explicó el economista Daniel Suchar.
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“A los profesionales liberales nos acaban de aumentar el impuesto sobre la renta casi un 15% y a las empresas también. Si querían pensar en una reactivación económica con este tipo de imposiciones será contraproducente. Ninguna empresa aguantará un 36% de impuestos sobre la renta. El panorama es una calle sin salida”, añadió el experto.
A esto se suma que en otros países como Venezuela, Ecuador y Colombia, anunciaron como temporales el impuesto a las transacciones y nadie pudo quitarlo después.
Suchar comentó que la ideología del Gobierno responde a tener un Estado grande y el tener muchas personas del partido en sindicatos y universidades le ha impedido hacer recortes verdaderos en el gasto.
Asegura que la venta de Fanal y Bicsa es un confite que no aporta gran cosa al déficit y la idea de movilidad laboral en el sector público en tiempos de gran desempleo es prácticamente un sueño.
No se necesita
El economista Leiner Vargas Alfaro asegura que la economía tica no está quebrada, sino que está cerrada y que lejos de andar viendo dónde nos endeudamos, deberíamos utilizar los recursos económicos con los que contamos.
“El país no necesita ningún préstamo de 1.750 millones de dólares del Fondo Monetario Internarnacional (FMI) para mejorar la salud de su economía. Vivimos un evento extraordinario como la pandemia y por eso necesitamos soluciones extraordinarias, lejos de las tradicionales soluciones que siempre proponen aumento de impuestos o salir corriendo a pedir plata afuera.
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“Actualmente la inflación es prácticamente cero, en el Banco Central los dólares fluyen de manera significativa, no hay una devaluación fuerte. Este panorama permite que perfectamente podamos usar las letras del tesoro (que es la platica que a lo largo de los años hemos podido ahorrar los ticos como país), una parte para cambiar deuda cara por deuda barata y la otra para inyectarle a las empresas y que así se reactiven pronto y el país reactive su motor económico”, explica el economista.
No entiende el economista cómo el actual gobierno del presidente Carlos Alvarado sigue empeñado en pedir préstamos millonarios y en dólares.
“Yo no entiendo cómo no usan el sentido común. ¿Qué está pasando? Es muy sencillo, lo que está pasando es que en una casa donde viven mamá, papá y dos hijos, no hay plata para la leche de los chiquitos, pero resulta que los papás tienen en una gaveta las joyas que le dejó la abuela; sin embargo, no quieren ir a empeñarlas para poder comer, eso no lo entiendo”, ejemplificó don Leiner.
Al especialista le duele que las políticas actuales solo se encaminen a subir impuestos para golpear más a la clase media, la clase trabajadora, además, golpean las empresas.
“Estamos a punto del congelamiento y el Gobierno quiere bajar más la temperatura. Más impuestos al salario significa que la gente comprará menos en los comercios, eso significa que las empresas la tendrán más difícil para sobrevivir y si van cerrando las empresas, hay más desempleo”.
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Está muy claro para el economista que usar las letras del tesoro es algo que no se puede hacer todo el tiempo.
“Es que en época de crisis uno empeña hasta las joyas de la abuela para poder comer; sin embargo, lo que está pasando ahorita es que dejamos las joyas guardaditas y nos vamos a pedir plata para pagar después intereses altísimos… ¿quién entiende eso?”, cuestionó.
Por su parte La Unión Costarricense de Cámaras también considera que el Gobierno no está poniendo de su parte como debería.
“El sector empresarial del país ya realizó un aporte significativo cuando se pasó la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas. Asumimos nuestra responsabilidad y aceptamos nuevos impuestos, pero con el compromiso de que el gasto público iba igualmente a ser controlado y reducido con acciones concretas y de alto impacto, lo cual no ha sucedido", afirmó José Álvaro Jenkins, presidente de UCCAEP.
No tiene buen ambiente
La propuesta de nuevos impuestos hecha por el Gobierno ha generado un montón de críticas de muchos sectores.
Ahora debe ser presentada y aprobada al FMI y si dicen que sí, debe pasar a la Asamblea Legislativa para pasar el proceso de aprobación, desde una comisión.
Sería el préstamo y varias propuestas que deben presentarse como proyectos de ley.
Nueva República y varios diputados de otras fracciones ya anunciaron que votarán en contra de nuevos impuestos. El presidente legislativo Eduardo Cruickshank dijo que no le ve buen ambiente en Cuesta de Moras.