Usted quizás haya visto al doctor Carlos Estrada Garzona pasaditas la 1 de la tarde en Multimedios, en su espacio El Diagnóstico y pensó “qué doctor más simpático” y efectivamente lo es.
Este neumólogo que se robó el corazón de muchos costarricenses con su forma tan clara y sencilla de explicar las cosas es otro de los rostros que se popularizó a raíz de la pandemia y acá le contamos más sobre él.
Como buen brumoso de nacimiento es aficionado al Club Sport Cartaginés y asegura que fue a todos los partidos del cuadro blanquiazul hasta que perdieron contra Heredia en el 2013.
“Esa final la fui a ver a Heredia y ahí hubo un momento donde dije, ya no vuelvo más a los estadios, pero sigo viéndolos por tele. Aunque siempre seguí yendo a algunos partidos, cuando se podía”, contó el también médico internista y especialista en trastornos del sueño.
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Mide 1,83 metros, lo que percibe la gente al conocerlo en persona, pues en televisión, tal vez porque sale sentado, lo imaginan más bajito y hasta más rellenito.
“Cuando me ven en la calle muchos me dicen que qué alto que soy y lo segundo que me dicen es preguntarme qué parentesco tengo con el actor que interpretó a Daniel Valencia en la bendita serie Betty la fea, que recobró protagonismo nuevamente gracias a Netflix”, contó el especialista de 34 años.
Y si usted vio la novela, sabe que son igualiticos, la única diferencia es la barba, que según nos contó el doctor, lo acompaña desde los 14 años.
Y como dice el dicho, si no puedes contra ellos úneteles, por eso en el cole terminó interpretando al personaje en un obra de teatro que montaron.
Es soltero, pero no se ilusione, porque tiene novia, a la que describe como una excelente persona que entiende que la gente se le acerca a saludarlo cuando andan juntos.
Fiebrazo de las motos
El brumoso ama las motos, actualmente tiene dos, una para andar en la ciudad y una Ducati, para los viajes largos que disfruta realizar por todo el país con otros fiebres como él.
“Siempre me han gustado (andar en moto), pero hasta que salí de la “U” a los 30, decidí comenzar a hacer todo lo que había aplazado por los estudios, y ahora es como mi terapia para relajarme y dejar de pensar en muchas cosas del día a día”, comentó el doc.
Incluso asegura que le ha servido para conocerse a sí mismo y para hacer nuevos amigos.
Escucha todo tipo de música, en especial la electrónica, en italiano, indie rock y música tropical para bailar.
Otro de sus pasatiempos es viajar, conocer otras culturas y disfrutar de nuevos lugares. La pandemia le quitó esa posibilidad y lo que más le duele es que no le permitió visitar a su única hermana, quien vive en Italia.
El doctor conoce muy bien el país de la bota, pues estuvo de intercambio en Italia a sus 15 años, lo que le permitió aprender italiano, idioma que habla perfectamente al igual que el inglés.
“Eso me cambió mucho la vida, porque me dio un perfil muy bueno de mi personalidad, la versatilidad que tengo ahorita”, reconoció.
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Lo que le gusta
Le gusta mucho su trabajo, ver pacientes y el poder aclararle cada duda que tengan sobre la enfermedad que padecen.
“Esta nueva etapa en televisión con el programa El Diagnóstico y como presentador de Dr. Salud, los lunes, ambos en Multimedios, es un reto, pero me permite ir creciendo y hacer algo que me apasiona como es comunicar, que requiere no solo de la información profesional, sino de explicarla en forma sencilla a la gente”, explicó.
La primera vez que salió en tele fue en el 2018 en Buen Día y desde el 5 de marzo del 2020, cuando un colega lo llamó para preguntarle “Dr. si el covid entra, ¿qué podría pasar?, esa fue la primera pregunta y de ahí, no ha parado hasta el día de hoy.
Asegura que no lo hace por vanidad, sino para ayudar a muchas personas mediante la medicina preventiva, aclarando sus dudas.
“Hay mucha gente que cree que uno quiere salir en tele por figurar, pero los que me conocen saben que yo trato mucho de mantener mi privacidad en familia. Que sigo siendo el mismo doctor Estrada que he sido toda la vida y eso ni ha cambiado ni va a cambiar”, apuntó.
Trabajó diez años en la Caja, pero ahora solo se dedica a la consulta privada, tanto en el hospital Cima en Escazú, como en Cartago.
Desde hace cuatro años se mudó a Chepe por el brete y dice que su personalidad es una combinación balanceada de sus dos apellidos Estrada Garzona.
“Los Estrada son más serios, característica que mantengo cuando estoy explicando conceptos técnicos, pero el desenvolvimiento ante cámaras, el dinamismo, y la interacción con la gente son más de los Garzona”, explicó el hijo de un matrimonio de abogados.
Por sus venas corre sangre salvadoreña por la familia materna y española por los paternos, de los que heredó ser directo al hablar, decir las varas como son.
Doc deportivo
Mejengas de fútbol y baloncesto en el cole, tenis competitivo en la juventud y ciclismo recreativo en la actualidad, no importa el deporte que sea, para el doc lo importante es ejercitarse siempre.
De niño integró las ligas menores de Cartaginés y acompañaba a su padre a mejenguear en canchas abiertas.
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Gracias al protagonismo que ha adquirido en la televisión la gente se acerca en la calle a saludarlo, felicitarlo o hacerle una consulta.
“Hay una cercanía muy bonita, porque se ha construído como una familia que se percibe cuando me ven y me hablan como si me conocieran de toda la vida. Cuando ando en bici, en los altos, me dicen hola doctor, que dicha que lo vemos por aquí”, narró.
Reconoce que es como un agradecimiento de la gente que lo motiva a seguir adelante en su labor, en especial en este momento en que la gente ya está cansada.