EscucharDos viejitas mayores de 80 años fueron abusadas física y sexualmente por personas cercanas a ellas. Ambos hechos son independientes y se dieron con menos de un mes de diferencia.
Las dos adultas mayores fueron llevadas al hospital Nacional de Geriatría y Gerontología Raúl Blanco Cervantes. Las autoridades del centro médico realizaron las denuncias correspondientes.
La doctora Milena Bolaños Sánchez, directora de este hospital, asegura estar preocupada porque pareciera que están aumentando este tipo de casos en los que personas conocidas se aprovechan de la cercanía que tienen con adultos mayores para abusar sexualmente.
“Se trata de dos mujeres de más de 80 años, el hospital ya realizó las denuncias correspondientes, sin embargo, damos la voz de alerta porque no podemos permitir que en nuestra sociedad sucedan este tipo de agresiones a personas adultas mayores que son sumamente vulnerables”, enfatizó la Dra. Bolaños.
El hospital desde hace más de 25 años cuenta con el Comité de Estudio Integral del Anciano Agredido (CEINAA), que está formado por un equipo multidisciplinario de profesionales del centro médico. Por mes atienden un promedio de 25 a 30 casos de adultos mayores que son víctimas de maltrato físico, psicológico, patrimonial o por negligencia y abandono, o por abuso sexual.
Según explicó Jeannette Martínez Muñoz, jefa de Trabajo Social y coordinadora del CEINAA, en promedio por año se presentan entre tres y cuatro casos de abuso sexual, sin embargo, en esta oportunidad fueron dos en un solo mes, con un grado de violencia que pone en alerta al centro médico por la complejidad de cada caso y donde los agresores son miembros de la familia de las pacientes.
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“Hacemos un llamado a la población para que juntos velemos por el bienestar de nuestras personas adultas mayores, siendo fundamental estar alertas a la protección y supervisión de sus derechos, para que de manera conjunta evitemos estas situaciones tan lamentables”, manifestó Martínez.
La trabajadora social hizo varias recomendaciones para prevenir abusos sexuales contra adultos mayores e incluso detectar cuando se están dando.
Lo primero es no dejarlos solos en ningún momento, el apoyo y acompañamiento continuo es vital.
También es importante escuchar sus temores o preocupaciones cuando está con alguna persona, familiar o no, que la pone nerviosa o incómoda. Hay que creerles y validar sus sentimientos o manifestaciones.
Estar atentos y observar cambios en su comportamiento habitual (tristes, llora con facilidad, se aísla, no quiere comer y evita conversaciones).
Ante estos signos de alerta se debe acudir con el adulto mayor al centro de salud más cercano para solicitar la atención y el apoyo de los equipos de la CCSS.
