Ricardo Cerdas, de 45 años, está detenido por no pagar pensión alimentaria y cruza los dedos para que se apruebe el proyecto de ley que le permitiría salir a buscar brete o a trabajar.
La Teja habló con él en La Reforma, en San Rafael de Alajuela, donde lleva dos meses detenido.
-¿Por qué lo detuvieron?
Porque tengo desde el 2016 de no tener trabajo estable.
-¿A qué se dedicó?
Fui taxista informal,pero trabajar como taxista informal no es garantía de un salario estable. Hay que pagarle una cuota diaria al dueño del carro, dejarlo limpio, echarle gasolina y al fin te llevás cuatro mil colones, a lo mucho.
¿Cuánto debe de pensión?
Como millón y algo.
-¿Por qué dejó que se le acumulara?
Yo le expliqué a mi hija que la situación estaba complicada, que viéramos cómo nos podíamos ayudar porque ella tiene 18 años y no trabaja ni estudia y si ella quiere aspirar a algo más uno pensaría que sería bueno que trabajara y ella me dijo 'sí, papito' y, bueno, aquí estoy.
-¿Sabe del proyecto de ley que les daría la oportunidad de salir a buscar trabajo?
Pienso que es un proyecto de ley muy importante, razonable y adecuado para muchos de nosotros. Yo, por estar aquí, no puedo trabajar y no puedo generar ingresos, por lo que ella (la hija) no va a recibir el monto establecido o una parte que uno pueda dar; otro factor que influiría con el proyecto es el beneficio de seguir trabajando y liberar la carga para el Estado porque somos una carga, ¿cuánto le cuesta al Estado tenernos aquí durmiendo y comiendo? Todo esto lo pagan los costarricenses con sus impuestos. (Al Estado le cuesta unos ¢780.000 mensuales mantener a una persona en prisión).
-¿Qué es lo más complicado de esta situación?
Duele desperdiciar el tiempo, porque yo sé que en la calle por lo menos genero un poquito, hacemos nuestra vida normal, pero cuando caemos acá nuestra nueva familia queda en el limbo porque también depende de uno. Duele porque es un tiempo perdido, esto, así como se lo digo, es una alcahuetería del Gobierno.
-Usted es de Limón, ¿cómo haría para ir a buscar trabajo allá y volver a dormir acá?
Si este proyecto se canaliza bien, supongo que tienen que readecuar algunos centros penitenciarios como el de Limón, para estar ahí y no que nos desplacen hasta esta zona. Porque, sí, en efecto para mí sería difícil buscar trabajo en Limón y venir todas las noches acá.
-¿Cómo es un día suyo acá?
Cuando vine acá me temblaban las piernas. Venía con miedo y como hombre que soy tengo que confesar que lloré, pero los oficiales me ayudaron mucho. Un día típico acá es levantarse a las seis para ver que estemos todos, luego desayunamos dos bollitos de pan y a acostarse otra vez, ya por ahí de las diez levantarse a recoger el almuerzo y entre tres y cuatro viene la cena; a las cinco llega el recuento y después cierran pabellones y te quedás durmiendo. Esa es la vida acá, yo por dicha pude conseguir un trabajito acá limpiando las oficinas del director, no es un salario adecuado o acorde con la ley, pero uno mantiene la mente ocupada, pero no todos cuentan con ese beneficio.
-¿Usted cree que sería apto para el beneficio (de salir a buscar trabajo?
Yo soy un ejemplo claro de que sí es posible ese proyecto. No tengo vicios y soy capaz de salir adelante, sería bueno que la aprobaran porque así me beneficio yo y mi hija y, seamos honestos, sería una carga menos para el Estado. Si yo fuera otro tipo de persona aquí me quedo, porque aquí tengo comida, dormida, cable, llamadas, viene mi familia a visitarme, pero no quiero seguir siendo un parásito para el Estado. Eso me siento yo aquí, un parásito porque todo me lo tienen que dar gratis.