A propósito del día del Encuentro de Culturas, que celebramos este sábado 12 de octubre, Costa Rica tiene 80 años de no tener a un indígena como protagonista en sus billetes.
De hecho el Banco Central de Costa Rica, que imprime nuestra plata desde 1950, nunca usó desde ese entonces y hasta la fecha, a ningún indio en el colón.
El único banco que volvió a ver a nuestra cultura indígena fue el Nacional, en el billete de 10 colones de 1939. Esta entidad bancaria fue la encargada de imprimir nuestra plata antes del Central, o sea, del 50 para atrás.
En la parte de atrás de ese billete de 10 colones, de la serie F, aparecía de la cintura para arriba un “cacique indio de Costa Rica”, como bien lo describía el billetico. En la parte delantera aparecía el sacerdote Florencio del Castillo.
En un libro publicado por Museos de Costa Rica, en el año 2014, se explica que la ilustración de ese cacique fue hecha con grandes influencias de un dibujo del artista español Tomás Povedano, que vivió en Costa Rica.
El indio del dibujo de Povedano se llama “cacique huetar”, fue publicado en la Cartilla Histórica de Costa Rica (entre 1909 y 1937) y se dice que es el último rey de Talamanca, llamado Antonio Saldaña.
De hecho, las ilustraciones de Povedano y del billete tienen un penacho, joyas en el pecho y un bastón casi que idénticos a los que tiene Saldaña en una fotografía.
Princesa indígena
Dos años después de ese billete, en 1941, el mismo Banco Nacional emitió otro, de dos colones y de la serie E, el cual tenía en la parte de atrás una ilustración basada en otra pintura de Povedano llamada “El rescate de Dulcehe”.
En la parte de adelante de ese billete aparece el conquistador español Juan Vásquez de Coronado.
Dulcehe fue una princesa indígena en 1560, era hermana del cacique de los indios quepo, llamado Corrohore, y que habitaba en la zona sur de nuestro país.
Dulcehe fue capturada por los indígenas coto, que tenían broncas con los quepo. Eso motivó a Juan Vásquez de Coronado, quien se llevaba puras tejas con los quepo, a invadir las tierras de los coto hasta rescatar a la princesa.
Actualmente, en la familia de billetes actuales sí aparecen diferentes piezas arqueológicas precolombinas, piezas de joyería, cocina o un altar ceremonial en los sellos de seguridad, sin embargo, un rostro indígena no.
Gran deuda
Víctor Mena, un indio huetar costarricense ve como “un gran fallo de nuestros gobernantes, la ausencia de nuestra cultura, de nuestra gente y líderes. No hablemos de presentar un gran cacique, hablemos de presentar la cultura indígena, algo que no se ha hecho jamás. Es una gran deuda porque nos sobra cultura y representantes que pueden adornar un billete”.
De la misma forma Uriel Rojas, miembro de la comunidad indígena Rey Curré, de Buenos Aires de Puntarenas, dice que siempre ha existido una invisibilización del aporte Indígena en la identidad nacional.
"A pensar de que hemos tenido y tenemos personajes emblemáticos, su figura no ha sido plasmada en los billetes de los costarricenses.
“Creo que esa evasión ha sido el rostro de nuestra histórica realidad, la cual debe de ser más inclusiva si queremos robustecer la diversidad cultural de nuestra nación", dijo Rojas.
Patrimonio cultural
A Odir Blanco, indio Malecu que vive en el territorio indígena Guatuso, dice que la ausencia de indígenas ticos en los billetes es una muestra del olvido del país a esta cultura.
“En su momento habíamos logrado un acuerdo con la Junta de Protección Social para consolidar que el billete de lotería para el 12 de octubre fuese de representación indígena, se cumplió por un tiempo, después se dejó. Es importante dar a conocer la cultura indígena en todos los niveles, es urgente”, comentó.
El doctor Manuel Chacón Hidalgo, curador de monedas de los museos del Banco Central de Costa Rica, reconoce que el indígena y su cultura hacen falta en nuestros billetes.
“Hay una importancia al patrimonio biológico, sin embargo, se ha dejado de lado el patrimonio cultural”, aseguró, dando como ejemplo que sería precioso ver en un billete tico una alegoría del baile de los diablitos.
Misma historia
Si hablamos de las monedas, la historia es parecida, porque solo dos monedas en la historia tuvieron presencia indígena (la última en 1862).
Tras de eso, en los dos casos quisieron hacer una gracia y les quedó un sapo, porque mezclaron elementos indígenas con figuras femeninas que sacaron de arte europeo, entonces lo que salió al final fue como poner a una mujer blanca con vestimenta indígena.
Le consultamos al Banco Central por qué nunca han incluido a un indígena tico en la chochosca, pero no recibimos respuesta a la hora del cierre de esta nota.
La junta directiva del Central es, por ley, la que tiene la última palabra sobre qué y quiénes salen en nuestros billetes.
Así como desde 1950 no aparecen indígenas, tampoco han habido negros, chinos y solo dos mujeres: Emma Gamboa y Carmen Lyra. O sea, han dominado los hombres blancos.