¿Tiene un hijo con rasgos asiáticos y se burlan de él en la escuela porque lo relacionan con China, el país donde se originó el nuevo coronavirus?

Si es así, puede recurrir al protocolo de atención de víctimas con bullying o acoso escolar. Los maestros y el personal de los centros educativos están en la obligación de detener desde el primer momento toda burla hacia los estudiantes por raza, etnia, creencia religiosa o aspectos físicos.

Rocío Solís, directora de la Contraloría de Derechos Estudiantiles del Ministerio de Educación (MEP), manifestó que aunque no han recibido denuncias al respecto, es importante parar desde la escuela la cultura de chota que puede herir a los niños.

"No hay un protocolo establecido por este tipo de acoso, porque lo que aplicamos es el documento que ya existe en el MEP y que conocen en las escuelas y colegios.

“Aquí lo importante es no permitir ningún tipo de burla o comentario que vaya en contra del estudiante y mucho menos que el docente trate de normalizar la situación, porque esto es permitir la conducta ofensiva hacia el alumno”, dijo.

El año pasado se atendieron 200 casos de acoso escolar, mientras que en el 2018 se recibieron 77 denuncias y en lo que llevamos del curso lectivo del 2020 se han atendido 20 casos.

La mayoría tienen que ver con burlas por el aspecto físico del estudiante y en esta cifra hay casos de escolares y colegiales.

¿Qué hacer?

Si su chiquito es víctima de bullying, el primer paso es que el estudiante lo reporte directamente con el docente. El maestro o maestra está en la obligación de cortar de raíz ese comportamiento y si eso no pasa, los papás pueden reportar el caso a la dirección de la escuela o con la Contraloría.

“Es importante aclarar que a partir del próximo lunes, los casos se recibirán vía correo electrónico, a la dirección derechosestudiantiles@mep.go.cr o al teléfono 2221-4102. No atenderemos casos de forma personal, a raíz de la situación del coronavirus”, afirmó.

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Otra situación que no se puede permitir en los centros educativos son las burlas hacia estudiantes que presentan síntomas de enfermedades respiratorias o están resfriados.

"El choteo lo que lleva es a una afectación emocional del estudiante, tampoco podemos permitir que se burlen de los niños por su descendencia. Ellos no tienen la culpa de que papá o mamá tengan rasgos característicos de alguna cultura.

“Permitir este tipo de situaciones es dar pie a burlas por la nacionalidad de los niños”, indicó.