El Nazareno que se había quebrado y fue encontrado tirado en una bodega, sin vestir, sin ojos y sin corona de espinas agradeció la chaneadita que le dieron en la iglesia La Merced con un retoño lleno de vida en su cabeza.
Así como suena. El Nazareno luce hoy en día un hijito que nació del bejuco que le colocaron en la cabeza y que simula ser la corona de espinas. Usted lo puede comprobar en la iglesia La Merced pues está a vista de todos los fieles.
Además del hijito tiene unas raíces que caen de su cabeza como si fueran mechones verdes.
El Párroco de La Merced, Fernando Muñoz, dejó en claro que no es un milagro, pero dijo que puede considerarse como un mensaje que llega desde Arriba y cada quien tiene la libertad de interpretarlo como mejor le parezca.
En su caso, cree que es un llamado divino para que cuidemos a la Madre Tierra y para recordar que del sufrimiento y el dolor surge vida.
“Hay una cuestión interesante, defender a la naturaleza. El otro, en la sociedad de hoy todo es fiesta, placer y vacilón y cuando vienen las dificultades hay frustraciones. Cristo nos enseña, en su pasión, como se abraza la vida ante los problemas. Está diciendo que en medio del dolor y sufrimiento, en medio de las espinas, hay vida”.
¡Qué bejuco!
Resulta que el padre Muñoz se dedicó a restaurar imágenes en desuso en el templo y encontró al Cristo Nazareno. Entonces lo mandó a arreglar, cuenta el sacristán de La Soledad, Víctor Alvarado.
“Se hizo en tiempo de cuaresma y había que apurarse para que en Semana Santa estuviera listo. El restaurador me pidió que le ayudara con la corona de espinas y el vestido. En mi casa (Poás de Aserrí) hay un bejuco y todavía estaba verde y de allí hice la corona”, explicó Alvarado.
Después de eso, el señor que lo reparó pintó la corona del color café que tiene actualmente y lo llevaron de regreso a su nuevo lugar dentro de La Merced.
“Resulta que ayer (martes para los lectores) fui donde la imagen y vi que había enraizado. Seguro es por la humedad del templo y le dije al padre, ‘vea, floreció'”.
Al padre lo sorprendió bastante la escena, a tal punto que lo subió a su "Feis" personal, pues no se había dado cuenta.
En esa red social surgieron muchos comentarios de gente que vio la imagen y algunas de las ideas han puesto a pensar al padre.
“Sugieren que agarre el retoño y lo siembre a ver qué pasa. Es una bonita idea, pero tiene que hacerlo alguien que sepa. Debe tomarlo con cuidado y ponerlo en una maceta”.
Algunos fieles que estaban en la iglesia no se habían enterado de la curiosidad. L
Después de que La Teja les contó expresaron que podía ser desde la acción de algún pajarito que haya arrastrado semillas, hasta un mensaje que nos está mandando Dios.