Este lunes en la mañana, cuando muchos chanceros apenas empezaban a acomodar el producto, a don Gerardo Arias Castrillo ya se le habían acabado los billetes del sorteo de este martes.

Y es que el chaine de don Gerardo le ayuda a que el producto se le vaya más rápido que ligero, pues este chancero anda más chaneado que gerente de banco. Siempre viste con pantalón, camisa de vestir y una corbata que hace juego. Es decir, la pinta sí cuenta.

Don Gerardo dice que es su forma de trabajar, que desde que era guarda en el Liceo de los Lagos en Heredia anda bien catrineado y cree que eso jala clientes.

“Siempre me ha gustado andar así, por el respeto que uno adquiere por la presentación. No es algo que me haya enseñado alguien, es algo propio, siempre he sido así”, aseguró don Gerardo.

El señor tiene 67 años y todos los días lo encuentra frente al ministerio de Hacienda en San José centro, por decir otra seña, frente a la esquina suroeste del Teatro Nacional.

La Teja lo observó una vez encorbatado vendiendo el producto y quiso ver si siempre andaba así. Por eso, pasamos otras tres veces y siempre lo encontramos bien elegante.

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“A mí me llegan y me dicen, ‘un chancero como usted no hay en ningún lado’, por eso vengo. Es que hay muchos llenos de barba, mal vestidos, huelen mal... ¿qué impresión pueden dar?”, manifestó don Gerardo.

Contó que la gente está como loca con el acumulado y aseguró que los enteros que sacó a la venta este lunes no le llegaron ni al mediodía. Solo le quedan chances para el sorteo del viernes y la lotería del domingo.

“Esto es una locura. Se me fue todo en la mañana, la gente me compra un pedacito, o dos, o tres. De cualquier forma y cuando se vaya (el acumulado), la Junta vuelve a poner un buen premio para motivar a la gente”, dijo.

“Findes” con chaine deportivo

Eso sí, los sábados y domingos, don Gerardo se viste diferente, más informal, pero siempre manteniendo una buena imagen.

“Lo hago para cambiar un poco, los domingos me voy a rematar lo que me queda en el Mercado de las Pulgas (avenida diez, donde se hace el mayoreo)”.

También observamos que don Gerardo no se va solo en la pinta, su trato es muy educado, vende a precio y cambia fracciones premiadas sin poner peros.

“Uno debe ser honesto y legal siempre”, dijo.

Eduardo Viales, un jugador de lotería, le estaba comprando ayer a don Gerardo. Era la primera vez que lo hacía y le causó muy buena impresión.

“Ver un chancero así jala, definitivamente. No es igual que ver a alguien desalineado. Me da la impresión que este señor es ordenado y honesto”, dijo don Eduardo, guanacasteco que vive en San Francisco de Dos Ríos.

“A veces camino por la avenida central y voy preguntando y escogiendo. Alguien me sale con un sobreprecio y uno se va. Pero con este señor, que además lo trata de forma especial a uno, me fue bien”, comentó Viales.

Don Gerardo no dura un minuto sin clientes y eso que ya no le quedaban pedacitos para este martes, caso contrario a otros vendedores que tienen que ponerle bonito para vender el producto.

“Ha estado movido, la gente compra bastante y está motivada”, dijo un vendedor que no quiso dar su nombre, mientras que su cliente, José Abarca, comentó que no pudo encontrar el 16 ni el 25.

“Al final compré el 48 y el 52 y pedí un par de gallos tapados. El acumulado está bueno, es mucha plata”, dijo.