Este domingo 3 de abril Costa Rica elegirá al próximo presidente de la República, el cual comandará el Poder Ejecutiva a partir del 8 de mayo, por los próximos cuatro años.
Debido a la importancia de este día monseñor José Manuel Garita, presidente de la Conferencia Episcopal y el pastor Jorge Gómez, presidente de la Federación Alianza Evangélica Costarricense, hacen un llamado a católicos y evangélicos para que cumplan con el deber patriótico de ir a votar.
Monseñor llama a que todos trabajemos por buscar la unidad, en bien del país y pensando en el desarrollo integral de todos.
“Mi primer llamado es a vivir una fiesta cívica en paz y con respeto, que permita elegir de manera democrática a nuestros gobernantes. Asimismo, que sepamos apreciar este sistema electoral que muchas naciones desafortunadamente no gozan.
“Mi segundo llamado es para quienes sean elegidos, a fin de que puedan cumplir, por el bien del país, las promesas que han hecho para resolver muchas de las problemáticas que nos aquejan, y que, como sabemos, afectan especialmente a los más vulnerables.
“Otro llamado que quiero hacer es que elevemos todos, los católicos y creyentes en general, una oración a Dios para que proteja y bendiga a nuestra nación, que nos ilumine a todos, a fin de que podamos salir adelante y encontrar las vías que nos ayuden a reducir los índices de desigualdad, pobreza, desempleo e inseguridad”, dice monseñor Garita.
Serio compromiso
El pastor Jorge Gómez coincide con monseñor sobre la importancia de salir a votar.
“Tenemos un serio compromiso con la democracia, el patriotismo y el civismo. No podemos ignorar nuestro compromiso con el sufragio. No podemos permitir que el abstencionismo opaque nuestra imagen como país libre y que promueve la libertad. Tenemos la obligación patriótica y civil de salir a votar.
“En la Alianza Evangélica Costarricense una de las preguntas que les hicimos a ambos candidatos fue la urgencia de gobernar bajo el principio de amar a su prójimo como así mismo.
“Les hicimos ver (a José María Figueres y Rodrigo Chaves) el peligro que podría enfrentar nuestra democracia por el constante desencanto de nuestro pueblo costarricense hacia los políticos. Ambos se comprometieron a velar por el bienestar de los costarricenses, dejando de lado los privilegios, ambiciones y anhelos egocéntricos que se fomentan muchas veces cuando se tiene el poder.
“Como Federación Alianza Evangélica Costarricense no firmamos ningún documento, porque les hicimos saber que, si su palabra no era válida y honesta, lo mejor era que no debían pensar en gobernar a un país que estaba depositando su confianza en ellos y en sus mejores intenciones”, comentó el pastor Gómez.