Ruth de la O, oficial de la Fuerza Pública, es la feliz mamá de unos gemelitos que hace nueve meses llegaron a su vida para llenarla de amor y alegría.
Como manda la ley, cuando los bebés nacieron le dieron una licencia de maternidad por cuatro meses. Entonces Ruth desconocía que en el caso de un parto múltiple, según el reglamento de la CCSS, la madre tiene derecho a un mes más de permiso por cada bebito adicional vivo; es decir, a ella le correspondían cinco meses.
Los hijos de Ruth nacieron unas semanas antes de tiempo y debido a eso en la Clínica de Lactancia del hospital de San Ramón se los veían para asegurarse de que todo estuviera bien.
En diciembre pasado, un día en que Ruth los llevó a revisión, le preguntó a una funcionaria de la clínica si había posibilidad de extender la licencia de maternidad y la respuesta fue que no porque los bebés estaban sanos.
Cuando se le venció el permiso, la oficial sacó vacaciones para estar más tiempo con los chiquitos y en enero lo hizo de nuevo porque a los gemelos les dio covid-19. Por dicha se recuperaron rápido.
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“Después de eso volví al trabajo, en marzo me encontré con una mujer que había tenido un parto múltiple y me comentó que, según el reglamento de la Caja, se tiene derecho a un mes extra de licencia por cada bebito vivo”, recuerda.
La noticia la sorprendió.
“Lo primero que hice fue llamar al Ministerio de Trabajo y preguntar si era cierto y me confirmaron la información. Después me fui para el hospital de San Ramón a preguntar sobre el tema y traté de hablar con la Dirección Médica, pero no me lo permitieron; me dijeron que el encargado de ver las incapacidades era el médico a cargo de la consulta externa, de apellido Alfaro, pero al llegar a él me dijo que debía ir al ebáis que me correspondía a hacer la consulta”, contó.
El típico vaya aquí, vaya allá, vuelva aquí que padecen a diario muchos en instituciones públicas.
Nadie resolvió
A Ruth la fueron mandando de un departamento a otro del hospital. Tuvo que ir a la Clínica de Lactancia, de donde la remitieron a Ginecología y empezó a dar vueltas porque la mandaban de nuevo a áreas a las que ya había ido.
Aunque a quienes les consultaba la enviaban a otros departamentos, asegurando que no estaba en manos de ellos resolver el asunto, le daban a entender que como ya había pasado tanto tiempo e incluso ella ya había regresado a trabajar, era casi un hecho que había perdido su derecho al mes extra de permiso.
La oficial se cansó de andar de un lado para otro y con la ayuda de su compañero sentimental, que también es policía y además abogado, puso (en marzo) un recurso de amparo ante la Sala IV.
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Los magistrados pidieron a la Dirección Médica del Área de Salud de San Ramón un informe sobre el caso, pero nunca lo mandaron, así que no quedó claro por qué se negaban a darle el mes adicional que le correspondía.
Luego de analizar el caso, a finales de abril los magistrados pusieron las cosas en su lugar y le dieron la razón a Ruth y le ordenaron a la CCSS darle el mes de licencia que le debían. Comenzó a disfrutarlo el 28 de abril.
“Me siento satisfecha porque es un beneficio, yo antes no sabía y sé que como yo quizá otras mujeres tampoco lo saben y espero que mi caso les ayude,. Este mes extra de licencia es un beneficio y nadie se los puede quitar, el tiempo con los bebés no tiene precio y hay que respetarlo y disfrutarlo”, dijo.
Está feliz
La oficial está feliz al lado de sus pequeños, sobre todo porque ya van aprendiendo a comer.
“Esta licencia me cayó en un momento muy bueno, estoy empezando a darles ciertas comidas y estoy al pendiente de si algo les da alergia o les cae mal”, contó.
En su trabajo Ruth tiene un rol de tres por tres, es decir, trabaja tres días y luego tiene tres días libres. Se le hace eterno el tiempo que pasa lejos de sus gemelitos, desearía que tarde mucho en llegar el 28 de mayo.
“Como tengo dos hijos tengo derecho a dos horas de lactancia porque la ley dice que es una hora por cada hijo, en mi caso trabajo de seis de la mañana a cuatro de la tarde. Cuando estoy trabajando a veces mi pareja es el que se encarga de cuidar los bebés y si no mi mamá y mi hermana, así que siempre pasan bien chineados”, aseguró.