Carlos Eduardo Cerna Solís es un administrador de empresas a quien hace 10 años le diagnosticaron una enfermedad conocida como esclerosis múltiple en el hospital Rafael Ángel Calderón Guardia.
Aunque la noticia impactó su vida y la de su familia, ahora asegura que es un ser humano completamente normal, tras la medicación y el seguimiento permanente que recibe de parte del hospital.
Para este profesional en administración de empresas, la disciplina es fundamental si quiere tener la enfermedad bajo control y mantener la vitalidad de una persona de 28 años de edad.
Los fines de semana se le ve calentando en el polideportivo de Calle Blancos y corriendo en las calles de localidad de Goicoechea y todos los días se traslada a pie de su trabajo hacia su residencia en urbanización El Encanto de Goicoechea.
En el caso de Carlos debe inyectarse tres veces por semana el interferón beta 1 A en el cual la Caja invierte $2.5 millones al año (1.440 millones de colones) para mantener bajo tratamiento a los pacientes a quienes se le ha indicado.
Carlos combina este tratamiento con una buena dosis de actividad física y una alimentación basada en mucha fruta, verduras, vegetales y frescos naturales sin azúcar.
Hay 423 casos en el país
La Caja Costarricense de Seguro Social (Caja) mantiene bajo la lupa a 423 personas quienes, como Carlos, tienen esta enfermedad que afecta el sistema nervioso central y produce alteraciones en el cerebro y la médula espinal.
El tratamiento que deben recibir estas personas es tan costoso que, en promedio, la institución invierte $14.184 al año (unos ocho millones de colones) en cada paciente es decir $ 6 millones (unos 3.500 millones de colones) para la atención de la totalidad de la población diagnosticada con el padecimiento. El tratamiento para mantener bajo control la enfermedad es permanente.
En este momento, según el doctor Hugo Marín Piva, especialista de la dirección de Farmacoepidemiología de la Caja, existen 341 pacientes con fármacos que se hallan en la Lista Oficial de Medicamentos (LOM) y 82 que reciben terapias que no se encuentran en esa lista.
Medicina, alimentación y ejercicios
El doctor Esteban Vega de la O, coordinador de Servicios Farmacéuticos de la Caja, explicó que en estos casos se trata de pacientes que no responden a la terapia que está incluida en la LOM.
Gracias a que la Caja tiene dispuesto un formulario terapéutico abierto, el médico tratante tiene la posibilidad de solicitar autorización para indicar otro medicamento, según las condiciones clínicas del paciente.
Aunque se desconoce qué es lo que desencadena la Esclerosis Múltiple, si se sabe que la enfermedad lesiona la vaina de mielina que es el material que rodea y protege las células nerviosas lo que produce un bloqueo o retrasa los mensajes entre el cerebro y el resto del cuerpo.
Vega de la O explicó que estos pacientes reciben medicamentos biológicos que tiene la función de modificar el avance de la enfermedad a la par de medidas no farmacológicas como la actividad física y una dieta óptima.
Destacó que este grupo de paciente tiene por parte de la Caja un seguimiento estricto de enfermería y de farmacia y se trabaja con ellos para que su disciplina con el tratamiento farmacológico y no farmacológico sea total a fin de reducir los brotes que puede produce la enfermedad.