El cáncer de mama no respeta si usted es hombre o mujer, él ataca por igual, de ahí la importancia de que todos nos practiquemos el autoexamen una vez al mes.
Si no lo cree, le contamos la historia de don Mario Vega, sobreviviente de esta enfermedad desde noviembre del 2013.
"Yo soy un sobreviviente de la prevención. Hace 6 años, para finales de noviembre del 2012, andaba en una gira de trabajo en Limón y sentí como un fuego en el pecho, del lado derecho y empecé a ponerle cuidado. El médico me mandó a verme y fui a Fundeso gracias a una conocida y ahí me diagnosticaron un pequeño tumor en el pecho derecho. Dichosamente estaba encapsulado (no había echado raíces hacia ningún otro órgano)", recordó don Mario.
Pero por su mente nunca pasó la posibilidad siquiera de que se tratara de un cáncer de mama, su temor era que se tratara de un relojazo. Esa prevención lo tiene contando el cuento.
Le hicieron la biopsia, se realizó el ultrasonido y las mamografías como lo hace cualquier mujer, en ambas mamas, y nunca le detectaron el tumor que también tenía en su pecho izquierdo.
Fue hasta el 7 de noviembre del 2013 cuando estaba ya listo para la operación, que los médicos se dieron cuenta del cáncer en ambas mamas.
Para los malpensados que pueden creer que esto les pasa solo a los hombres que tengan los pechos grandes, don Mario de una vez lo aclara.
"No, yo soy de contextura gruesita, pero lo que he aprendido estos años al lado de Fundeso es que eso no tiene nada que ver, más bien la gordura dificulta que pueda detectarse", añadió el sobreviviente, quien es vecino de Desamparados.
Hijos prevenidos
Antes de pasar por esta dura experiencia don Mario dice que no conocía mucho de la enfermedad.
"No había nada de propaganda sobre el tema para entonces, yo había escuchado de un caso hace muchísimos años, pero aún falta mucho por dar a conocer, varias personas me dicen que si no fuera porque les doy mi testimonio pensarían que les estoy mintiendo", añadió el comerciante de 57 años.
"Los mismos hospitales han sido reacios a la atención de hombres con esta enfermedad. A mí me operaron, me dieron la salida y casi que si te vi ni me acuerdo", agregó Vega.
Don Mario tiene cuatro hijos, tres nietos y todos están en todas desde que él pasó por esta situación y se chequean de forma preventiva.
"Mi hijos participan conmigo en las caminatas y carreras y si Dios lo permite estaré presente este domingo en la que organiza Avon a beneficio de Fundeso", comentó.
Don Mario mantiene el control anual que se paga él mismo.
Apúntese a ayudar
Usted puede apuntarse a que la Fundeso siga ayudando a miles de pacientes cada año, participando este domingo 4 de marzo en la carrera o caminata organizadas por la empresa Avon. Será a las 8 a. m. saliendo 100 metros oeste de la estatua de León Cortés en La Sabana. La inscripción para la carrera cuesta ¢12.500, la caminata es gratis.