Algunos productos del mar se volvieron a meter en la red de la canasta básica, al menos por tres meses más, mientras los ministerios de Agricultura y Economía, deciden cuáles son los pescados que más consume el pueblo que menos harina gana y así no meterle el Impuesto al Valor Agregado.
Mientras pasan esos tres meses de estudio vuelven a la canasta básica los pescados frescos, enteros y en filete el atún, dorado, vela, marlin, espada, bonito, bolillo, pargo y corvina, siempre que no tengan ninguna preparación, o sean congelados sazonados, marinados, adobados, condimentados, o empanizados”, explicó el Gobierno en un comunicado.
Estos tres meses se lograron gracias a las conversaciones que mantiene el sector pesquero con el Gobierno porque todo lo que proviene del mar se sacó de la canasta básica en el nuevo Plan Fiscal.
Fue el presidente de la República, Carlos Alvarado, el que firmó un decreto llamado Reforma al Reglamento de Canasta Básica Tributaria, con el objetivo de tener más datos sobre los pescados y filetes que más come el pueblo y así no afectar a quienes los consumen y a los que venden.
En detalle, el decreto dice que en tres meses (que podría bien ampliarse a 3 meses más), el ministerio de Agricultura y Ganadería y el ministerio de Economía, Industria y Comercio “deberán elaborar un estudio que determine los tipos de pescado y filetes que son de consumo real y efectivo por parte de los hogares que conforman el 20% de la población de menores ingresos”.
Que mantengan en la canasta básica algunos productos del mar es de lo que más le está rompiendo el coco al sector pesquero por eso pegaron, desde el principio que se habló de un nuevo Plan Fiscal, el grito al cielo y por fin fueron escuchados.
“La firma de este decreto es un ejemplo de cómo desde todos los sectores, estamos haciendo esfuerzos importantes por atender las demandas ciudadanas y mantener la apertura al diálogo”, explicó el presi Alvarado.
Además del Presidente, el decreto fue firmado por Nogui Acosta, ministro de Hacienda; Renato Alvarado, ministro de Agricultura y Ganadería; y Victoria Hernández, ministra de Economía y Comercio.